Lika Shkhvatsabaia (Tiflis, Georgia, 1980), hija de un célebre escultor georgiano, estudió Bellas Artes en su país y reside en España desde hace cuatro años. Anteriormente estuvo algún tiempo en Nueva York. Recientemente, ha expuesto su obra en el Club 567 y en el Centro Cultural Casa de Vacas de Madrid. 

• ¿Cómo definiría a su pintura?

Mi obra en general pertenece al expresionismo abstracto, pero también tiene mucho color y pertenece al arte figurativo. Trabajo de modo individual, llevo toda mi vida vinculada a la pintura porque crecí en este ambiente. Mi padre es escultor y pintor y yo crecí entre artistas en Georgia, mi país natal. Desde entonces, he expuesto en varios países como España, Rusia, Italia, Portugal, Grecia, etc. El principal propósito de pintar es expresar mis sentimientos en color, y mis formas de construir o componer se vinculan a la abstracción, a lo físico, a la fuerza y a la materia. El predominio e intensidad que llevo a cabo con los usos del color, así como los matices que este me permite ofrecer, me ayudan a subliminar el lado más emocional e íntimo en el lienzo.

• ¿Cómo compone un cuadro?

En general me inspira la vida, cada momento del día, de la música, de los pintores antiguos, me inspiro mucho en el proceso de trabajar sobre el lienzo, crear la obra, la búsqueda de herramientas que puedan transformar y modificar muchas cosas en mi pintura. En muchas ocasiones, los lienzos tienen su origen en si mismos y construyen como un organismo autónomo que germina y se extiende a través de un proceso de desarrollo artístico neto, un proceso muy íntimo. Una idea en estado puro que es transferida en la materia desde mi lado cerebral más creativo.

 

• Su pintura se define como colorista, ¿se siente cómoda con este adjetivo?

Por supuesto, a través del color expreso mis sentimientos más profundos con diversa intensidad. Mi pintura es colorista porque tiene mucha energía y todo eso se transmite a la obra. 

• ¿Podría describir su última colección? 

Mi última colección es una serie sobre Madrid, ya que me encanta esta ciudad y me ha acogido con los brazos abiertos desde que llegué. Como homenaje, decidí crear esta serie sobre la capital española con varios tamaños de lienzo. Me siento muy feliz en esta ciudad. En la obra recreo vistas del parque del Retiro, el Palacio de Cristal, la Cibeles, la Gran Vía… todo ello de forma subjetiva.

• ¿Cómo influye Madrid en tu pintura?

Ha habido un cambio importante en sentido personal y este hecho se nota mucho en mi obra. Para hacer arte en general, creo que hay que estar más a solas con uno mismo para pensar, trabajar, así profundamente.

• ¿Qué pintores españoles le han influido?

Velázquez, El Greco, son mis favoritos, me dan una sensación particular. Me acuerdo de la primera vez que llegué a Madrid, llena de alegría y felicidad para ver el Museo del Prado. Tenía mucha ilusión y desde entonces he tenido una grata experiencia con las exposiciones que he llevado a cabo en este país.  

• ¿Qué tendencias artísticas considera más relevantes hoy en día?

Depende de la exposición y de los visitantes. Por ej. en general yo tengo una obra más abstracta, pero sin perder la conexión con la naturaleza. Siempre pienso que cuando en la obra hay algo vivo es mucho más interesante y tiene sentido que cada persona pueda sentir eso al contemplar una obra.

• ¿Cómo está el panorama pictórico en España?

Es bastante interesante, sobre todo arte contemporáneo. Ahora bien, hablando en general del estado actual de la pintura a nivel global, creo que es difícil estar de acuerdo con algunas ideas. El énfasis es la autoexpresión del artista en el deseo del mercado del arte, en su mercantilización. Esto lleva al artista a un camino difícil de entender y se distancia del arte verdadero. A pesar de las tendencias, los artistas siempre deberían estar cerca de la naturaleza y sus orígenes culturales.

• Tiene tres cuadros sobre las figuras de El Quijote y Dulcinea. ¿Qué le inspiró a crearlas?

Porque hace unos años participé en el homenaje a Cervantes en una galería madrileña y para esta exposición hice varias obras, como “El camino de Don Quijote y Dulcinea”, un retrato de la mujer como yo la veo. 

• ¿Cómo es la situación de la cultura en Georgia?

Estoy muy orgullosa porque el Ministerio de Exteriores de Georgia me otorgó el premio a la mejor pintura del año para promocionar la cultura georgiana en el extranjero. Realmente, creo que me siento tan bien y quiero tanto a España porque tiene mucho en común con Georgia.