Atresmedia nació hace más de tres décadas como una de las primeras televisiones privadas de España con el fin de seducir al espectador. ¿Cómo ha evolucionado el perfil de esos espectadores desde los inicios hasta nuestros días?

Han pasado 30 años y eso es mucho para una sociedad. Los espectadores españoles en relación con lo que nosotros hacemos, que es entretenimiento audiovisual, han ido evolucionando porque han tenido más oferta y se han ido sofisticando. En la misma medida nosotros nos hemos sofisticado y los productos actuales no tienen nada que ver desde el punto de vista de calidad de producción o historias, que terminan siendo infinitamente mejores que en nuestros inicios. ¿De qué modo se adaptan al constante cambio en los hábitos de consumo de entretenimiento e información que se están dando en nuestra sociedad? Nosotros hacemos bastantes estudios para intentar analizar las tendencias y lo que quieren los espectadores para irnos adaptando a lo que la gente quiere. En algunos momentos quieren más entretenimiento y en otros momentos demandan más información, y nosotros vamos adaptando nuestra parrilla a esas corrientes subyacentes que descubrimos en los estudios.

Atresmedia es uno de los grupos de medios más influyentes de España. ¿Han pensado en trascender nuestras fronteras? ¿De qué manera?

De alguna manera ya las hemos trascendido porque nuestro canal de Antena 3 Internacional tiene 53 millones de espectadores que suscriben nuestro paquete de suscripción de Latinoamérica y en la parte hispana de Estados Unidos. Hacer una operación de televisión como tal en otros países, aunque lo hemos estudiado muchas veces, no vemos mucha sinergia porque habría que hacer un producto adecuado para cada país y no es una línea que veamos en la expansión de nuestro producto.

El Grupo Atresmedia cuenta con televisiones, radios, medios digitales y también productoras de ficción, ¿dividir su modelo de negocio es también un modo de globalización? ¿Qué réditos genera en su compañía esta estrategia?

En realidad, no es dividir el modelo de negocio sino hacer lo que hacemos bien. Nosotros somos un productor de contenidos y todo lo que sea producirlos es a lo que nos dedicaremos. Nuestra manera de expandirnos es coger todas aquellas cosas que tienen que ver con nuestra manera de entender nuestro negocio. Y las hacemos porque creemos que somos buenos haciéndolo.

Los tiempos demandan cada vez más empresas que hagan la vida más fácil a sus potenciales clientes, y la tecnología es clave para conseguirlo. ¿Cómo han abordado esta transformación digital desde Atresmedia?

Somos una empresa digital desde el punto de vista de nuestra relación con los espectadores sin ninguna duda a través de nuestro Atresplayer, Atresplayer Premium o nuestro dominio web, permitiendo recuperar contenidos ya emitidos días después. Damos a los espectadores las facilidades para que lo consuma donde, como y cuando quiera. Desde el punto de vista de nuestra relación y de nuestro trato con nuestros clientes es absolutamente digital, entendiendo que les hacemos la vida fácil.

Atresplayer supone un cambio radical del concepto de televisión tradicional en España, ¿son las plataformas OTT el futuro de la información y el entretenimiento?

Las plataformas OTT están fundamentalmente basadas en entretenimiento y sobre todo de ficción. No es su objetivo fundamental, porque en el ámbito de los informativos es muy difícil que una plataforma que tiene un público muy diferenciado que paga por ese servicio, los informativos sean un punto de interés. Es una fortaleza de las televisiones en abierto, lo mismo que contra la actualidad. Los productos perecederos tienen un mal vivir en las plataformas, al contrario que un producto de televisión en abierto. No creo que vayan a incidir en esas líneas de contenido.

 

“Nuestro canal Antena 3 Internacional tiene 53 millones de espectadores que suscriben nuestro paquete de suscripción de Latinoamérica y en la parte hispana de Estados Unidos”

Como medio de comunicación, ¿cómo ve el tema de la publicidad de cara al futuro?

La publicidad seguirá siendo esencial porque las marcas tendrán que seguir diferenciándose, comunicando y cautivando a los distintos compradores, y los medios siguen siendo determinantes. Desde mi punto de vista, creo que se está volviendo a una tendencia de ver quien genera el último clic. Ha habido toda una campaña por parte de las grandes plataformas de ver quién lo genera y apropiarse del mismo, olvidando que hay toda una conversión donde uno tiene que captar la atención antes de lograr el clic.

Creo que se está empezando a notar que la cobertura de grandes medios como nosotros, somos los primeros generadores que hacemos que los consumidores vayan a esa marca porque el paso final puede darlo cualquier plataforma. Se ha puesto claramente de manifiesto que si quieres construir una marca, los medios tradicionales son fundamentales, igual que si quieres conseguir una venta. Más allá de las modas pasajeras y de la fascinación de tantos KPIs que no saben en que se convierten, los medios tradicionales somos esenciales para que una marca prospere, tenga clientes, reputación y comunique de forma efectiva dedicando una gran parte de sus presupuestos a los medios tradicionales.

Por último, ¿cómo imagina el futuro de su empresa y de su sector en los próximos diez años?

Yo creo que nuestra empresa con 30 años ha demostrado su capacidad, no de aguantar, sino de mejorar, de crecer y de convertirse en una parte más importante de la vida de los ciudadanos a los que nos dirigimos y creo que lo seguiremos siendo en el modo en que toque en cada momento y la tecnología existente.

La tecnología no es más que un medio de distribución de los contenidos, que es lo que la gente quiere al fin y al cabo y lo que nosotros sabemos hacer. Y lo distribuiremos como se tenga que distribuir, ya sea en el metaverso o en cualquier otro espacio, este grupo será el que ponga a disposición de los ciudadanos esos contenidos sin importar la tecnología o el modo en que se pueda prever que traerá el futuro.