En los últimos tiempos parece que la actualidad se ha llenado de cisnes negros, esos acontecimientos a priori altamente improbables, pero que impactan de forma contundente en nuestras vidas y a los que difícilmente podemos esquivar. Estos cambios en el devenir normal nos exigen una transformación de la mentalidad y de la forma en cómo encaramos los nuevos retos y la clave está en la palabra adaptación. Solo los individuos, empresas o instituciones capaces de adaptarse con rapidez podrán hacer frente a las situaciones inesperadas, para lo que se requiere una gran flexibilidad. En el sector del renting lo hemos vivido en primera persona durante la crisis del COVID; las empresas tuvieron que tomar decisiones de forma acelerada para ofrecer soluciones a sus clientes que garantizaran su movilidad. Los mecanismos estaban ahí, pero se requería la determinación y la creatividad necesaria para ponerlas en marcha.
Crecimiento en todos los parámetros
Esta agilidad en la implantación de sistemas flexibles de gestión es una de las razones que ha permitido al sector del renting mantener su línea de crecimiento en todos los parámetros, durante estos dos últimos ejercicios. De este modo, al cierre de 2021, según los datos publicados por la Asociación Española de Renting de Vehículos, el sector registraba un incremento de su parque de vehículos del 7,17 %, acercándose a la cifra redonda de las 800.000 unidades. De su lado, las matriculaciones crecían un 24,64 % y el peso del renting se situaba en el 25,27 % sobre el total del mercado. Pero ¿quiénes están detrás de ese crecimiento? Los clientes son la clave. Nuestra actividad está soportada por la confianza que depositan en nosotros los clientes de renting y por eso a mi me gusta enfatizar en la cifra de su crecimiento. A lo largo de 2021, el renting ha sido capaz de conquistar a 26.873 nuevos clientes, lo que ha supuesto un incremento del 12,11 %, hasta un total de 248.809, muy cerca de alcanzar otra cifra redonda, la de los 250.000 clientes. Además, se mantiene la tendencia de crecimiento entre los segmentos de clientes más pequeños; de modo que ocho de cada diez nuevos clientes de renting han sido autónomos y particulares y este segmento ya copa el 16,80 % del parque total de vehículos de renting. Un hito importante que se alcanzó en 2021 fue el denominado sorpaso de los clientes que son personas físicas a los clientes que son personas jurídicas. De modo que los clientes autónomos y particulares copan el 51,61 % del total de los clientes de renting, mientras las personas jurídicas suponen el 48,39 %. Esto tiene una gran importancia para el sector, porque era un objetivo que se veía lejos hace algunos años. Así, en los datos de la evolución del sexenio que también ha publicado la AER recientemente, veíamos cómo las personas físicas incrementaban un 1.170,54 % su presencia en el parque de vehículos de renting, al aportar 123.340 unidades, un 35,33 % del incremento total del parque en ese periodo. De este modo, el peso de este segmento en parque ha pasado del 2,35 %, que se contabilizaba en 2015, al 16,80 % que hemos mencionado antes, 14,45 puntos porcentuales más.
Un servicio flexible y de calidad
En esta evolución del sexenio se mencionaban los «ingredientes » que han sido esenciales para que el renting ocupe hoy este lugar tan esencial en la movilidad y en las decisiones de consumo de los ciudadanos, así la flexibilidad es la cualidad del renting más relevante para su crecimiento, pero también la difusión en todos los segmentos de clientes, como hemos visto, la calidad del servicio, la proactividad o la búsqueda de la excelencia en el trato con el cliente.
Centrándonos en la calidad del servicio, cada dos años, la AER, junto con las compañías de renting, impulsa una encuesta para conocer la percepción de calidad que tienen los clientes de renting. En la última edición, de 2020, se ha vuelto a constatar que la satisfacción global de clientes y usuarios sigue incrementándose y son precisamente los clientes particulares los que más lo valoran. En este sentido, la satisfacción global de los clientes de renting es de 7,63 puntos. Además, se pudo medir cómo había afectado la situación de pandemia en la percepción del servicio por parte de los clientes y la conclusión es que las valoraciones se han visto mejoradas tras declararse la pandemia. Uno de los aspectos que ha contribuido a mantener la buena percepción de los clientes ha sido el impulso de la digitalización y es que para el renting el concepto experiencia cliente es de vital importancia, porque, como decimos habitualmente, «esto no va de coches», es un negocio enfocado a dar soluciones a las personas.
En el centro de la nueva movilidad
Los buenos resultados del renting tanto cuantitativos como cualitativos manifiestan cómo este sector se ha situado en el centro de lo que denominamos nueva movilidad. Es decir, una movilidad más sostenible, conectada, digital y, por supuesto, segura. El renting se ha convertido en la puerta de acceso para muchos clientes a las últimas tecnologías y en un motor indudable de la electrificación del parque. No en vano, matricula uno de cada tres vehículos electrificados. Esto se explica, en gran medida, porque el renting ayuda a mitigar la incertidumbre que las nuevas tecnologías pueden aparejar y el cliente consigue así externalizar los riesgos. Esta contribución a la descarbonización del parque se apuntala con una creciente presencia de vehículos propulsados por energías alternativas, más allá de los electrificados, es decir, híbridos y de gas. Así, al cierre de 2021 este tipo de vehículos tenían un peso en las matriculaciones totales de renting del 29,15 %, frente al 20,95 % que suponían en 2020. Esto se traduce en que los vehículos que matriculó el sector en 2021 emitían menos CO2 y consumían menos combustible que los matriculados por el resto del mercado.
Otro punto fundamental en esta nueva movilidad es la seguridad, porque solo si es segura la movilidad puede ser sostenible y aquí el renting también mantiene un fuerte compromiso, no solo al matricular los vehículos con mejores resultados en los test Euro NCAP, sino porque tiene una política activa de prevención, con instrumentos como cursos formativos para usuarios o certificaciones de seguridad, como la ISO 39001.
«Los cambios siempre requieren adaptación, pero el sector del renting cuenta con la fortaleza y la flexibilidad suficientes para mantenerse en el centro de una movilidad cada vez más sostenible, conectada y segura»
En definitiva, estamos ante un sector consolidado que permite externalizar riesgos y favorece un uso y gestión de una movilidad más sostenible, racional y segura. Es evidente que vivimos un momento disruptivo, en el que nos toca afrontar los cambios en un entorno que puede parecer poco propicio, pero ahí está el reto, en la capacidad de adaptación que mencionábamos al principio del artículo. No son tiempos fáciles, pero ya se sabe que «nunca un mar en calma hizo fuerte a un marinero» y aunque no sabemos cómo impactarán todos los acontecimientos imprevistos que están aconteciendo en nuestra sociedad, apostamos porque el renting mantendrá su línea ascendente, como lo ha hecho en los principales mercados europeos, y seguirá copando cada vez más espacio en la movilidad. Nosotros seguiremos remando en la dirección que nos marquen nuestros clientes.