El crecimiento del PIB de China se aceleró al 1,6 % en el primer trimestre
Actualidad | Última hora | 16 de abril de 2024
En el primer trimestre de 2024, el Producto Interior Bruto (PIB) de China registró una notable expansión del 1,6%, superando la expansión del 1% observada en el último trimestre del año anterior. Este rendimiento ha superado las expectativas iniciales, especialmente en un contexto de dificultades continuas en el sector inmobiliario, según los datos proporcionados por la Oficina Nacional de Estadística de China. Este desempeño ha llevado al Fondo Monetario Internacional (FMI) a considerar una posible revisión al alza de sus previsiones de crecimiento para el país.
En comparación con el mismo trimestre del año anterior, la economía china creció un 5,3%, acelerando ligeramente desde el 5,2% interanual registrado en los últimos tres meses de 2023. Este crecimiento fue impulsado por un aumento del 3,3% en el sector primario, incluyendo un aumento del 3,8% en la agricultura. El sector secundario creció un 6%, liderado por una expansión del 6,1% en la industria, mientras que el sector de servicios, que constituye el 59% de la economía china, creció un 5%.
Estos resultados reflejan un continuo impulso de recuperación, como destacó la Oficina Nacional de Estadística, y pueden influir en las futuras decisiones de política económica tanto en China como a nivel internacional. El economista jefe del FMI, Pierre-Olivier Gourinchas, ha reconocido que el desempeño de China en el primer trimestre fue «más alto que las estimaciones y ciertamente también más alto que las estimaciones del Fondo», lo que abre la puerta a revisiones al alza en las proyecciones de crecimiento de la institución para China, que actualmente son del 4,6% para 2024 y del 4,1% para 2025.
Sin embargo, el sector inmobiliario sigue presentando desafíos significativos, con una persistente debilidad que podría requerir reformas estructurales, incluyendo la recapitalización o liquidación de algunos promotores inmobiliarios, para mitigar las causas fundamentales de esta debilidad. Además, el FMI también destacó la necesidad de fomentar el consumo interno en China, en un momento en que la economía sigue dependiendo en gran medida del sector exportador, lo cual podría complicarse en el contexto de las tensiones comerciales actuales.
El análisis del FMI sugiere que, aunque el crecimiento económico de China en el primer trimestre ha sido robusto, la recuperación sigue siendo frágil y podría enfrentar nuevos desafíos en los próximos trimestres, especialmente si las dificultades del sector inmobiliario no se resuelven y si la demanda externa y las presiones desinflacionarias persisten como factores de riesgo.