Según el Barómetro del Carsharing en España realizado por la consultora PONS Mobility para la AVCE, durante el 2023 el uso del vehículo compartido alcanzó un aumento del 10% ¿A qué atribuye que pueda deberse este crecimiento tan sustancial?

El incremento se debe fundamentalmente a dos factores: por un lado, el mayor conocimiento por parte de los ciudadanos de esta opción de movilidad, y por otro, el aumento de más del 20% en la flota disponible para los clientes, lo cual incrementa la concentración de vehículos por superficie y hace que sea cada vez más fácil para el cliente acceder a uno de nuestros vehículos.

Es evidente que el mercado crece, pero eso requiere un gran esfuerzo por parte de las compañías del sector que deben realizar importantísimas inversiones para facilitar este servicio. Además, se observa claramente que, para lograr un crecimiento del 10%, se necesita un incremento del doble en la cantidad de vehículos disponibles.

Según el Barómetro, 3 de cada 4 usuarios de carsharing poseen un vehículo privado. ¿Cómo influye esto en la estrategia de mercado de Free2Move?

El Carsharing ofrece soluciones de movilidad no solo a aquellos que no disponen de un vehículo, lo hace también de manera complementaría a aquellos que lo tienen y que no quieren en algún momento preocuparse por las restricciones de circulación del centro de la ciudad, limitaciones temporales para estacionar en superficie o simplemente a aquellos que les resulta más conveniente realizar el trayecto de ida con carsharing en vez de su vehículo particular y volver con otro medio de transporte público, ya sea metro, taxi o similar. Es muy importante darse cuenta de que nuestro cliente no es usuario exclusivo de carsharing, nuestro usuario combina todas las alternativas de movilidad posibles dentro de la ciudad.

Muchas veces la elección del carsharing como medio de transporte depende de la facilidad a aparcar en su destino y de la disponibilidad de vehículos cerca de donde se necesita. Desafortunadamente siempre hay mayor presión de vehículos desde el centro hacia la periferia, ya que siempre es más difícil aparcar en el centro y hay más demanda en las zonas más concurridas del centro. Esto provoca una fuerte salida de vehículos del centro, donde los vehículos, una vez aparcados, son rápidamente utilizados por nuevos clientes que tienden a llevarlos hacia la periferia.

Las futuras restricciones para acceder a las ciudades con vehículos propios según su etiqueta harán cada vez más difícil moverse con los vehículos más contaminantes. El carsharing se convertirá en una alternativa para quienes necesiten un vehículo para moverse en las zonas más restringidas o a aquellos que vivan en estas áreas donde la red de transporte público sea muy buena y decidan prescindir de tener un vehículo en propiedad.

En ocasiones, la elección puede hacerse por el tipo de vehículo que un particular disponga, nosotros podemos ofrecer distintos tipos de vehículos que se adapten a cada una de las necesidades puntuales de los clientes.

Adicionalmente, ofrecemos más comodidad, despreocupación y economicidad ya que ofrecemos numerosos parkings privados disponibles para nuestros clientes (Recoletos, Canalejas, Goya, Olavide, Bernaveu) donde el cliente puede aparcar gratis y en muchos casos recibiendo una compensación de 4 euros por colaborar con nuestras operaciones simplemente colocando la manguera de carga en el vehículo al finalizar el trayecto en uno de esos parkings.

¿Tiene Free2Move planes para expandir su servicio de carsharing en respuesta al crecimiento de la demanda a otras ciudades o incluso las zonas actuales dentro de las ciudades en las que está presente?

El carsharing es un negocio que se debe sostener solamente con los ingresos generados por los trayectos realizados, no recibe ningún apoyo económico de las administraciones públicas. Esto significa que para que sea viable debe ser rentable.

Para que este modelo de alquiler por minutos funcione, cada vehículo debe tener múltiples alquileres diarios ya que si sólo hay dos alquileres pongamos de 5 euros cada uno, uno para ir al trabajo y otro para volver, eso solo generaría 10 euros diarios lo que serían 300 euros al mes lo que haría inviable mantener este servicio.

Las áreas residenciales generan principalmente durante la semana trayectos a los centros de trabajo por la mañana y regresos por la noche. Un vehículo que llega a una zona residencial por la tarde tiene una altísima probabilidad de no moverse hasta primera hora de la noche.

Para que el sistema de vehículo compartido funcione y sea económicamente viable, debe estar localizado en zonas urbanas de tamaño grande con un nivel mínimo de densidad poblacional y al mismo tiempo donde haya actividades de negocios, de comercios y de ocio que aseguran que haya un movimiento de los vehículos a lo largo del día.

El tamaño de la ciudad es importante, ya que es necesario que los usuarios requieran un vehículo para sus desplazamientos intraurbanos, y al mismo tiempo hagan necesario un volumen mínimo de vehículos y de viajes para justificar los costes de implantación y mantenimiento.

Por otro lado, debe haber una voluntad política por parte de los ayuntamientos, donde haya estacionamiento regulado, para permitir el aparcamiento gratuito de estos vehículos en la calle. Dado a lo ajustado de los márgenes, tener que pagar cualquier tipo de tasa por el aparcamiento en superficie haría inviable este modelo.

En Madrid, se reunieron todos estos requisitos, densidad demográfica, tamaño mínimo, áreas de usos mixtos y voluntad política ya que existe la exención de ticket de la hora para los vehículos eléctricos. No es casualidad que haya hasta 6 compañías compitiendo. En otras ciudades que podrían ser susceptibles de tener carsharing, como Barcelona, no se ha podido contar con este servicio para sus ciudadanos por la falta de predisposición política hasta la fecha.

¿Cuáles son los mayores desafíos operativos que enfrenta Free2Move en la gestión de su flota de carsharing?

En cuanto a operaciones hay dos elementos fundamentales:

Por un lado, está la gestión de recarga de los vehículos ya que esto determina la disponibilidad de vehículos para los usuarios, y está íntimamente ligado con los costes operativos de la compañía. Cuando empezamos con la actividad el primer vehículo que tuvimos fue el Citroën C-Zero, este vehículo tenía una autonomía teórica de poco más de 100km lo cual hacía que fuera necesario tener a 100 personas dedicadas 24/7 a la recarga de los vehículos, actualmente nuestro Peugeot e208 y Fiat 500e tienen una autonomía de unos 300km lo cual hace que, con una tercera parte de las personas dedicadas a la recarga, tengamos una mayor disponibilidad. Esto hace la diferencia para que el modelo sea viable a un precio competitivo.

Por otro lado, está la gestión de los daños en los vehículos y promover un uso responsable y cívico de los mismos. Es importante que la gente entienda que un vehículo compartido debe ser cuidado como si fuera propio. A lo largo de estos años uno de los principales quebraderos de cabeza ha sido el vandalismo, el fraude y los daños en los vehículos. Poco a poco, los ciudadanos se han concienciados en la necesidad de cuidar los vehículos, los sistemas ADAS han contribuido a reducir los percances y los avances tecnológicos han hecho más difícil el fraude, lo que ha permitido que el servicio sea mejor y más sostenible.

Con un mercado cada vez más competitivo, ¿cómo se diferencia Free2Move de otros servicios de carsharing?

Free2move, a diferencia de otras compañías de Carsharing, complementa su oferta dentro de la misma app con otros servicios de movilidad, no solo ofreciendo alquileres por minutos/horas, sino que también ofrece a los usuarios alquiler de vehículos por días e incluso por meses y años.

Esto permite que un cliente que necesite un vehículo de cero emisiones para desplazarse solo por Madrid, desde el punto A al punto B, tenga a su disposición un Fiat 500 eléctrico. Si desea viajar a Segovia, puede optar por un Peugeot e208 con 320 kilómetros de autonomía, y si planea pasar una semana en la costa, puede alquilar un Peugeot 5008 con 7 plazas, un Jeep Compass o un Mokka. También podría alquilar cualquiera de estos vehículos solo por los meses de veranos o para cualquier necesidad temporal. Esta flexibilidad dota a nuestro servicio de una gran capacidad de adaptación a las necesidades del cliente, brindándole libertad, tranquilidad y flexibilidad, al permitirle disponer del tipo de vehículo que necesite en cada momento por un precio muy competitivo, con total inmediatez y sin compromisos económicos.

¿Cómo ve el futuro del carsharing en España y globalmente en los próximos cinco años?

Es evidente que la vida en las ciudades está cambiando, los espacios públicos son cada vez más escaso para los vehículos y se intenta limitar el tráfico y la contaminación en las ciudades. Eso hace que el acceso a los centros urbanos con un vehículo propio sea cada vez más caro y complicado. Tener un vehículo en estas ciudades se convierte en un verdadero quebradero de cabeza.

El carsharing ofrece una alternativa viable a estos problemas, ya que, para algunas personas, desplazarse en transportes públicos no siempre es práctico. Sin embargo, la posibilidad de combinarlo con la flexibilidad del carsharing lo convierte en una opción factible frente a mantener un vehículo propio con todos sus costes asociados solo para utilizarlo en momentos puntuales.

Creemos que los beneficios son evidentes para las ciudades, ya que contribuye a la descongestión del espacio público. Esto, sumado a la creciente preocupación de los ciudadanos por la reducción de emisiones y los costos asociados con tener un vehículo propio en una gran ciudad, hará que el carsharing se convierta gradualmente en una de las primeras opciones a considerar por los ciudadanos para su movilidad. Para las administraciones, será una de las formas de movilidad a promover, lo que impulsará un gran crecimiento en este mercado en los próximos años.