Durante la última década, las criptomonedas poco a poco han ido separándose de la concepción marginal económica y se han ido posicionando como fuente fiable de ingresos pasivos y activos, atrayendo desde pequeños inversores hasta grandes fondos de inversión.
Aunque, a pesar de este posicionamiento, la pregunta sigue siendo la misma: ¿invierto o espero?
Está claro que la volatilidad de las Criptomonedas, sigue siendo un factor clave y decisivo para muchos.
La volatilidad es uno de los factores más conocidos sobre las Criptomonedas. Bitcoin, por ejemplo, experimentó una caída del 65% en 2022, pasando de un máximo de $ 69,000 en noviembre de 2021 a rondar los $ 20,000 en algunos momentos de 2022.
Según CoinMarketCap, la capitalización total del mercado de Criptomonedas en 2023 alcanzó los 1.1 billones de dólares, después de haber caído desde los $3 billones en 2021.
Esto deja claro que quienes invierten en criptomonedas deben estar preparados para enfrentar fuertes fluctuaciones en los precios y no esperar que sea un mercado seguro como puede ser algún otro mercado de inversión.
Un informe de JPMorgan indica que los inversores institucionales han empezado a reinvertir y volver a concentrarse en el mercado cripto, lo que podría darle más estabilidad (cuantas más personas apuesten por este mercado, menos volátil se volverá).
Los fondos de cobertura han comenzado a incluir criptomonedas en sus carteras, algo que era impensable hace algunos años. En un informe de PwC de 2023, se señaló que más del 60% de los fondos de cobertura tradicionales están explorando las criptomonedas como parte de sus estrategias de diversificación de riesgo.
Esto podría ser una señal de que, a largo plazo, la adopción institucional podría amortiguar la volatilidad que tanto preocupa a los pequeños inversores. Sin embargo, los analistas también advierten que aún hay factores que pueden seguir generando volatilidad, como las regulaciones, que varían significativamente de un país a otro.
Está claro que la regulación está cambiando el panorama: uno de los mayores desafíos para las criptomonedas sigue siendo la regulación gubernamental. En Estados Unidos, la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) ha intensificado su escrutinio sobre ciertos activos digitales. Mientras tanto, en Europa, el reglamento MiCA (Markets in Crypto-Assets), que entrará en vigor en 2024, establecerá normas claras para los emisores y plataformas de criptomonedas, lo que podría aumentar la confianza en estos mercados.
Si bien la regulación puede desalentar a algunos inversores, para otros puede ser una oportunidad. La claridad regulatoria puede proporcionar un entorno más seguro y predecible para los inversores. Según un informe de Chainalysis, el 56% de los inversores institucionales creen que una mayor regulación es positiva para el mercado de las criptomonedas, ya que podría aumentar la adopción masiva.
Entonces bien, ¿invertir o esperar?
Aquí es donde surge la pregunta principal: ¿deberías invertir ahora o esperar? La respuesta depende de tus objetivos financieros y de tu tolerancia al riesgo.
- Si tienes alta tolerancia al riesgo: Las criptomonedas, especialmente Bitcoin y Ethereum, han demostrado tener un enorme potencial de crecimiento a largo plazo. Según un estudio de Fidelity Digital Assets, el 47% de los inversores institucionales creen que las criptomonedas son una buena cobertura contra la inflación. A largo plazo, podrías obtener buenos rendimientos si estás dispuesto a soportar la volatilidad.
- Si eres más conservador: Tal vez sea mejor esperar. Como señala un informe de Bloomberg Intelligence, se espera que la inflación global siga siendo alta en 2024, lo que podría afectar los mercados de criptomonedas. Además, aún falta por ver cómo impactarán las nuevas regulaciones y si efectivamente podrán estabilizar el mercado.
- Diversificación: Una estrategia intermedia podría ser diversificar una pequeña parte de tu portafolio en criptomonedas. No necesitas apostar todo tu capital en este mercado volátil, pero sí podrías beneficiarte de sus posibles subidas.
Invertir en criptomonedas en 2024 sigue siendo una decisión que debe tomarse con cautela. La volatilidad persiste, aunque la adopción institucional y las nuevas regulaciones podrían traer mayor estabilidad. Si tienes una alta tolerancia al riesgo, podrías considerar aprovechar las caídas del mercado para posicionarse a largo plazo. Sin embargo, si prefieres ser más conservador, podrías esperar a ver cómo se asientan los cambios regulatorios y cómo responden los mercados.
Como siempre, la clave está en informarse bien, seguir las tendencias y, sobre todo, no invertir más de lo que estás dispuesto a perder.