El sector de la construcción ha sido históricamente un pilar fundamental de la economía española, representando aproximadamente el 10 % del PIB y empleando a más de 1,3 millones de personas. Sin embargo, uno de los grandes retos a los que se enfrenta en la actualidad es la digitalización, más concretamente la integración de la Inteligencia Artificial, que podría cambiar radicalmente la forma en que las empresas gestionan proyectos, optimizan recursos y mejoran su productividad.
Es evidente que aún queda trabajo por hacer. De acuerdo con el Índice de Digitalización elaborado por la Comisión Europea, el sector de la construcción es uno de los más rezagados en materia de digitalización en comparación con otras industrias, algo que, sin duda, repercute directamente en su productividad actual y su futuro crecimiento. En el caso español, de acuerdo con el último informe de ONTSI sobre Indicadores de Uso de Inteligencia Artificial en las Empresas Españolas, el sector de la construcción es uno de los menos adoptantes de estas tecnologías, con solo un 4,7 % de las empresas utilizando IA. Este dato es revelador, pero también refleja una oportunidad clara: la IA puede ser la clave para acelerar la transformación de este sector y mejorar su eficiencia.
Y es que, en un sector tradicionalmente analógico, cualquier fallo puede traducirse en costes adicionales y/o en retrasos. Por lo cual esta tecnología se convierte en una gran aliada para optimizar la toma de decisiones; ofreciendo soluciones que van desde sistemas de gestión de proyectos y plataformas en la nube para análisis de datos hasta ERPs específicos con los que gestionar sus recursos y herramientas diseñadas para abordar los desafíos diarios del sector.
Uno de los principales desafíos del sector es la mejora de proyectos y la optimización de los presupuestos, tareas que, sin el apoyo de tecnología automatizada, suelen convertirse en un gran quebradero de cabeza para las organizaciones. Según un informe de KPMG, el 47 % de las empresas españolas ya utiliza la inteligencia artificial en sus procesos de información financiera, y se espera que esta cifra alcance el 93 % en los próximos tres años. Dichos datos evidencian el papel fundamental que desempeña esta tecnología, pues, gracias a la inteligencia artificial, es posible analizar diversas variables en los diseños para identificar áreas de mejora, lo que da lugar a planes más eficientes. Esto permite optimizar el uso de los materiales y, por ende, maximizar los presupuestos, logrando un aprovechamiento mucho más efectivo y sin imprevistos.
Unido a ello nos encontramos con la aplicación de la IA a través de sistemas de visión computacional y análisis de datos para la detección temprana de posibles fallos estructurales en el diseño del proyecto. Estos sistemas pueden identificar anomalías en las infraestructuras antes de que se materialicen y se conviertan en problemas mucho más graves, lo que permite a las organizaciones anticiparse a posibles incidentes y tomar medidas preventivas.
Por último, y quizá de los más importantes, hay que tener en cuenta el papel crucial que desempeña la inteligencia artificial en la mejora de la seguridad y la prevención de riesgos, algo que en el sector de la construcción se hace indispensable ya que las personas se enfrentan a situaciones en las que la seguridad puede estar comprometida de forma casi constante
¿Por qué no avanzamos más rápido?
Si los beneficios son tan claros, ¿qué está frenando su adopción? La respuesta radica en varios factores: la resistencia al cambio, la percepción de una inversión inicial elevada y la falta de formación especializada. Muchas empresas aún ven la IA como una tecnología futurista, cuando en realidad ya existen soluciones accesibles y adaptadas a las necesidades del sector.
Como proveedores de soluciones tecnológicas, nuestro trabajo es hacer que la adopción de IA y otras herramientas avanzadas sea accesible y comprensible para las empresas del sector de la construcción. Es normal que muchas organizaciones se sientan abrumadas por la velocidad del cambio tecnológico, pero debemos ofrecerles soluciones que sean sencillas, escalables y adaptadas a sus necesidades específicas.
Desde Cegid creemos que el sector de la construcción en España se encuentra en un punto de inflexión. El escenario que tenemos ante nosotros es ilusionante a la par que desafiante. La tecnología ha llegado a todas las industrias y ésta también debe sumarse a esta ola digital para disfrutar de los beneficios que proporciona, al mismo tiempo que se asegura su futuro y su crecimiento.
El sector de la construcción no puede permitirse quedarse atrás en la revolución tecnológica. La IA es la aliada perfecta para mejorar la eficiencia y reducir costes. Y en un entorno donde la innovación marca la diferencia entre el éxito y la obsolescencia, la pregunta correcta es: ¿Estamos listos para dar el paso?
La tecnología está disponible. Ahora solo falta la decisión de aprovecharla.