Los costes directos de construcción residencial suben un 4,2 % en 2024

Acumulan un alza del 40 % desde 2020

Actualidad | Vivienda | Redacción | 21/03/2025

Perú

Los costes directos de construcción en edificación residencial aumentaron un 4,2% en 2024, reanudando la senda alcista tras la ligera caída del 0,9% registrada en 2023. Desde 2020, los costes han experimentado un encarecimiento acumulado de casi el 40%, impulsados por factores como la escasez de mano de obra cualificada, el aumento de la demanda de personal y el encarecimiento de materiales clave.

La mano de obra y los materiales impulsan la subida

Según el Índice de Costes Directos de Construcción de ACR, el indicador se situó en 175,86 puntos en 2024, frente a los 168,78 puntos de 2023 y los 126,99 de 2020. La recuperación pospandemia, las interrupciones en la cadena de suministros y la guerra en Ucrania han sido elementos clave en esta escalada.

Guillermo Jiménez, director general de ACR, destaca que la mano de obra sigue siendo uno de los principales factores de presión al alza. La escasez de perfiles cualificados y el aumento del número de obras iniciadas han generado una mayor competencia entre empresas por atraer talento. Además, materiales como el hormigón, el acero corrugado y los morteros de cemento han registrado subidas significativas.

Disparidad de tendencias entre partidas

Aunque el índice general aumentó, algunas partidas registraron descensos. Las bajadas más pronunciadas se dieron en impermeabilización y cubiertas (-9,6%), vidriería (-9,2%) y divisiones interiores (-6,9%). Por el contrario, otras categorías se encarecieron, como aparatos sanitarios y grifería (+4,7%) y carpintería exterior (+4,4%).

Previsiones para 2025: la presión continuará

ACR anticipa que los costes seguirán subiendo en 2025, debido a la tendencia alcista de las materias primas y las tensiones en la disponibilidad de personal. La compañía advierte que esta situación no solo incrementa los costes, sino que también ralentiza la ejecución de proyectos, en un contexto en el que la demanda de vivienda sigue superando ampliamente la oferta.

Jiménez apunta a la necesidad de apostar por la construcción industrializada, como solución para aumentar la productividad y reducir la presión sobre la mano de obra. Según sus estimaciones, este tipo de edificación es entre un 25% y un 30% más rápida y requiere entre un 50% y un 70% menos de personal trabajando en obra.

El índice de ACR, que toma como referencia los precios de materiales, su elaboración y la mano de obra necesaria para su instalación, estima que estos componentes representan aproximadamente el 80% del coste total de una obra.