La CEOE mantiene previsión de crecimiento pero alerta de pérdida de productividad y márgenes
Actualidad | Empresa | 29/07/2025

La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) mantiene su previsión de crecimiento del PIB para 2025 en el 2,5% y en el 2% para 2026, aunque advierte de un contexto económico cada vez más incierto. A pesar del buen comportamiento de la demanda interna, la patronal pone el foco en los riesgos derivados del encarecimiento regulatorio y laboral, el deterioro del sector exterior y la caída de la productividad, factores que podrían lastrar la competitividad empresarial a medio plazo.
Demanda interna firme frente a un sector exterior debilitado
El último avance de la Contabilidad Nacional confirma un crecimiento trimestral del PIB del 0,7%, apoyado principalmente en el consumo privado (+0,8%) y la inversión (+1,6%). La CEOE destaca que esta dinámica interna ha logrado compensar la aportación negativa del sector exterior, cuya contribución al crecimiento fue de -0,2 puntos en el segundo trimestre y de -0,6 puntos en términos interanuales. El retroceso de las exportaciones de bienes y el repunte de las importaciones debilitan el saldo comercial en un contexto de incertidumbre global.
Construcción y servicios lideran la expansión sectorial
En cuanto al comportamiento por sectores, la construcción y los servicios mantienen un ritmo de crecimiento superior al de la industria y la agricultura, que evolucionan de forma más moderada. La patronal valora positivamente el efecto de la moderación de los costes financieros y el respaldo de los fondos europeos como factores clave para sostener la inversión. Sin embargo, advierte que la solidez de la actividad doméstica podría no ser suficiente si se prolonga la debilidad del entorno exterior.
Empleo en crecimiento, pero con señales de fatiga en productividad
La creación de empleo continúa siendo robusta, con un aumento del 3,5% en los puestos de trabajo a tiempo completo. No obstante, la CEOE señala una “caída preocupante” de la productividad por ocupado, que retrocede un 0,7% interanual. Las horas trabajadas también muestran signos de desaceleración, lo que plantea dudas sobre la sostenibilidad del actual modelo de crecimiento sin mejoras en eficiencia.
Costes laborales al alza y presión sobre los márgenes empresariales
Desde el punto de vista de las rentas, la remuneración de los asalariados aumentó un 7,6%, mientras que los costes laborales unitarios crecieron un 4,5%. Este incremento de costes contrasta con la débil evolución del excedente bruto de explotación (EBE), que apenas avanzó un 0,1% y representa ya solo el 41,1% del PIB, una de las cuotas más bajas de la serie histórica. La patronal concluye que, si esta dinámica persiste, las empresas podrían perder capacidad para sostener inversión, empleo y competitividad en el medio plazo.