Maxam lanza bonos por 1.200 millones y repartirá 440 millones en dividendos

Maxam, el grupo especializado en soluciones de voladuras y explosivos industriales, ha cerrado una refinanciación de deuda por valor de 1.200 millones de euros mediante dos emisiones de bonos con vencimiento en 2030. La operación coincide con la previsión de un resultado bruto de explotación (ebitda) récord de 342 millones de euros para 2028, frente a los 256 millones esperados este año. Parte de los fondos captados se destinarán al reparto de un dividendo extraordinario de 440 millones y a la recompra de acciones, lo que eleva el total devuelto a los accionistas este ejercicio a 788 millones de euros.

Desapalancamiento progresivo con respaldo operativo

Según Fitch Ratings, que ha otorgado a la compañía una calificación de BB-, Maxam finalizará el año fiscal con un ratio de apalancamiento de 5,7 veces su ebitda. La agencia prevé una reducción gradual del endeudamiento hasta 4,7 veces en 2028, respaldada por un flujo de caja sólido y una cartera de pedidos robusta por valor de 2.000 millones de euros. La duración de los contratos firmados garantiza ingresos estables a medio plazo y apoya la credibilidad de los objetivos financieros planteados en el plan de negocio.

El negocio minero impulsa las previsiones de crecimiento

Maxam, presidida por José Manuel Vargas —exresponsable de Aena—, ha registrado ventas globales de 1.035 millones de euros en el último ejercicio, de las cuales el 64% proceden del negocio minero, centrado en la extracción de oro y cobre. Fitch estima un crecimiento anual de ingresos del 5% al 7% en los próximos años, sin contemplar operaciones corporativas relevantes. Tras la venta de Expal Systems a Rheinmetall, la compañía no prevé nuevas desinversiones a corto plazo, aunque mantiene en venta sus filiales en Rusia.

Una estrategia enfocada en rentabilidad, visibilidad y control financiero

Controlada en un 74,73% por el fondo estadounidense Rhône Capital y en un 25,27% por directivos y varios family offices, Maxam ha optado por una estrategia financiera centrada en aumentar la rentabilidad a medio plazo sin comprometer el control sobre el riesgo operativo. Fitch ha destacado la calidad de la documentación final de la emisión y la coherencia del pricing con las previsiones anteriores, lo que confirma la confianza del mercado en el perfil financiero de la compañía pese a su actual nivel de apalancamiento.