Renfe compra el edificio Faro por 109 millones y ahorrará más de 100 millones frente al alquiler

Empresa | Finanzas | 25/11/2025

Renfe ha cerrado la compra del edificio Faro de Madrid a la gestora francesa Ardian por 109 millones de euros, con el objetivo de reubicar a los trabajadores que deben abandonar las oficinas de Chamartín debido a las obras de Madrid Nuevo Norte. La empresa calcula que esta operación permitirá un ahorro superior a 100 millones de euros en amortización, ya que el coste acumulado en alquileres durante 50 años –horizonte habitual en inversiones inmobiliarias– habría ascendido a 230 millones.

Un nuevo hub corporativo junto a Atocha

El edificio adquirido se sitúa en la zona de Méndez Álvaro, próximo a la estación de Atocha y a otros centros de trabajo de Renfe en la Avenida Ciudad de Barcelona y el Paseo de las Delicias, donde el espacio ya se ha quedado insuficiente para el crecimiento previsto. La compañía destaca que la reubicación permitirá concentrar servicios, mejorar la colaboración entre equipos y elevar la calidad de la experiencia del empleado en términos de confort, en un contexto de incorporación anual de más de mil nuevos profesionales y renovación global de recursos.

Un proceso de compra autorizado por Patrimonio del Estado

El proceso comenzó en junio, cuando Jaesure, filial de Ardian y propietaria del inmueble, invitó a Renfe a presentar una oferta. Tras varias fases de análisis, la operadora presentó una propuesta no vinculante el 18 de julio para evaluar las condiciones técnicas, jurídicas y económicas del activo. Posteriormente elevó el expediente patrimonial y la solicitud de autorización a la Dirección General del Patrimonio del Estado, requisito imprescindible para cualquier compra pública. Con la autorización concedida, Renfe remitió la oferta vinculante al vendedor. La comercialización del edificio estuvo gestionada por CBRE y el diseño corresponde a GCA Arquitectos.

Una operación estratégica para reforzar la estructura inmobiliaria de la compañía

Renfe argumenta que la adquisición del Edificio Faro es la opción más favorable por su impacto económico y por el valor estratégico que aporta a la empresa pública, que dispone de un patrimonio inmobiliario limitado y ve en esta operación una oportunidad para consolidar su infraestructura corporativa.