«La innovación ha sido fundamental para que Iberdrola se posicione como una de las primeras empresas por capitalización bursátil del mundo»

¿Cómo definiría la innovación en el contexto empresarial actual? ¿Qué sectores consideraría estratégicos?

La innovación hoy en día es algo que hay que hay que hacer para poder competir en los mercados globales. Hay una serie de tecnologías que están cambiando el panorama mundial, como la de los materiales y las ligadas a la biociencia. Y eso luego habilita otras tecnologías como la digitalización y la información o la energía sostenible. La energía es el motor de nuestra economía. Y también destacaría las tecnologías relacionadas con las nuevas industrias: los centros de datos, la electrificación de todos los sectores… Todo eso es lo que está moviendo ahora mismo el mundo.

¿Qué papel juega la innovación en la estrategia de Iberdrola? ¿Cuáles son los 2-3 proyectos más innovadores que están desarrollando actualmente?

La innovación ha sido fundamental para que Iberdrola se posicione como una de las primeras empresas por capitalización bursátil del mundo. Empezamos con la energía eólica, y luego hemos seguido ese camino con los bombeos, con energía solar y con las redes.

Nuestra innovación va sobre todo enfocada a mejorar cómo se pueden introducir estas energías renovables en el mix energético y cómo se lleva esta energía de productores a consumidores a través de las redes. Y también, ayudar y facilitar a los consumidores a que cambien sus usos energéticos de combustibles fósiles a usos eléctricos.

En cuanto a los proyectos destacaría la nueva digitalización de toda la red para tener un control exhaustivo de qué es lo que está pasando en la red y poder mejorar la calidad del servicio. Y en el área eólica offshore estamos desarrollando proyectos gigantescos en el Mar del Norte y en Estados Unidos. Por último, tenemos una joint venture sobre cargadores de vehículos eléctricos en alianza con BP.

¿Cree que Europa puede encontrar su propio modelo de innovación o está condenada a ir a remolque de EE.UU. y China?

Yo creo que Europa debe acelerar en cuanto a programas y estrategia. Hay dos tipos de formas de hacer innovación, una es lo que se llama políticas de push, que es meter dinero en tu sistema de innovación para que produzca cosas. Pero también existen las políticas de pull, que consisten en realizar proyectos que impactan en mi industria, lo que hace que el sistema de innovación trabaje alineado con la industria para producir nuevos productos y servicios.

Europa es bueno haciendo el push, metiendo recursos, pero no hemos sido tan eficaces en estas políticas de pull. Capitalizar compañías o startups que hacen productos novedosos para que puedan tirar de todo el ecosistema de innovación va a ser algo realmente importante.

¿Qué oportunidades y amenazas representa esta ‘Guerra Fría tecnológica’ para Iberdrola y para las empresas españolas?

La guerra tecnológica tiene su reflejo también en el sector energético. China ha tomado con determinación la bandera de los nuevos productos relacionados con las renovables, las baterías y el vehículo eléctrico, y en Europa hemos dejado en manos de otras compañías que fabriquen esos productos.

Para Iberdrola es muy importante poder llevar tecnologías y productos al consumidor a través de nuestra cadena de suministro. Es muy importante que todas las innovaciones que se están produciendo a escala global las incorporemos y seamos pioneros en ellas. Y que, a través de nuestros proveedores, parte de esos productos que se fabrican tengan un gran componente local.

¿En qué sectores España está liderando o tiene la oportunidad de liderar en materia de innovación dentro de Europa?

España lo ha hecho bastante bien en todo lo relacionado con la energía sostenible. También es importante que haya compañías como Iberdrola que son líderes mundiales en el sector, porque eso hace que tires de todo el ecosistema innovador. Luego hay otras tecnologías como temas digitales o biociencia, en las cuales tenemos una buena posición y que debemos seguir impulsando.

¿Qué impacto tendrá la IA en la innovación en los próximos años? ¿Cómo se posiciona Iberdrola en este panorama?

La inteligencia artificial es una tecnología que está emergiendo con mucha fuerza, que va a tener impacto en determinados verticales y va a permitir ayudar a mejorar procesos, a idear nuevos productos y a hacer una planificación mucho mejor.

Más allá de la inteligencia artificial generativa, nosotros estamos utilizando la tradicional para predicciones de generación con energías renovables, gestión de nuestros activos, planificación de red, reposición de servicio de forma automática o para ayudar a nuestros clientes a consumir de manera mejor.

¿Qué tres palabras definirían el futuro de la innovación en España y Europa?

La innovación hoy en día no se entiende si no es una innovación digital. Debe tener en cuenta la demanda social por un mundo sostenible y eso incluye no solamente la energía, sino el uso de materiales y el cambio climático.

La otra parte muy importante es que todo esto lo tenemos que hacer de una forma competitiva. Tenemos que hacer productos más competitivos y que le den mayor servicio al cliente. Hay que tener esto en cuenta porque si no siempre estaremos dependiendo de regulaciones.