Las pensiones subirán en torno al 2,7 % en 2026 tras confirmarse el IPC promedio anual

Actualidad | Finanzas | 12/12/2025

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Las pensiones contributivas subirán alrededor del 2,7 % en 2026, aplicando la fórmula establecida en la reforma de pensiones, que actualiza las prestaciones según el IPC interanual promedio de diciembre a noviembre. Tras publicarse el dato definitivo de noviembre (3 %), la media del periodo diciembre 2024-noviembre 2025 se sitúa en el 2,66 %, porcentaje que se redondeará en torno al 2,7 %. La subida beneficiará a 9,4 millones de personas que perciben más de 10,4 millones de pensiones contributivas, así como a los 734.000 integrantes del Régimen de Clases Pasivas. Desde 2021, la ley garantiza que las pensiones mantengan su poder adquisitivo mediante revisiones anuales vinculadas a la inflación.

Impacto económico en pensionistas y evolución de las cuantías

El Ministerio de Inclusión estima que la subida del 2,7 % supondrá unos 572 euros adicionales anuales para una pensión media de jubilación, mientras que la pensión media del sistema aumentará en 498 euros al año. En noviembre, la pensión media fue de 1.316,7 euros, un 4,4 % más interanual, y la de jubilación alcanzó 1.511,5 euros mensuales, tras subir un 4,3 %. Ese mes se abonó además la paga extraordinaria, con un importe medio de 1.492 euros en jubilación.

Bases máximas y pensión máxima subirán por encima del IPC

La reforma diseñada por José Luis Escrivá establece que las bases máximas de cotización se actualicen con el IPC más 1,2 puntos hasta 2050. Para 2026, esto implica un aumento aproximado del 3,9 %, situando la base máxima en unos 5.101 euros mensuales. La pensión máxima también crecerá con el IPC más un 0,115 %, alcanzando los 3.359,6 euros mensuales en catorce pagas. El proceso de destope gradual seguirá vigente hasta 2050, lo que añadirá alrededor de un 3 % acumulado en ese periodo.

Las pensiones mínimas y no contributivas crecerán por encima del IPC

La reforma incorpora incrementos adicionales para las prestaciones más bajas con el fin de mejorar la suficiencia y reducir la pobreza. En 2025, las mínimas subieron un 6 % y las no contributivas y el IMV un 9 %, por encima del 2,8 % de las contributivas. En 2026, las pensiones no contributivas volverán a incrementarse por encima del IPC, con el objetivo de recortar un 20 % la brecha con el 75 % del umbral de pobreza. Las pensiones mínimas contributivas con cónyuge a cargo también tendrán aumentos adicionales para converger en 2027 con el 1,5 del umbral de pobreza, fijando el objetivo en unos 16.500 euros anuales. El IMV replicará esta evolución al estar referenciado a las no contributivas.