Instructure es un referente global en tecnología educativa. ¿Qué les motivó a dar el paso de llegar al mercado español y cómo ven la situación actual de la educación en España?

Instructure nació en Estados Unidos y, actualmente, está presente en más de 100 países. Surgió con una misión: educar y hacer la educación accesible a través de la tecnología. En el mercado español vemos una oportunidad enorme en la transformación del sistema educativo porque en España tenemos un porcentaje mínimo de educación en línea y los alumnos están buscando cada vez más opciones flexibles para sus procesos de aprendizaje. En ese sentido, y a través de nuestra plataforma Canvas podemos ser un partner para las instituciones educativas españolas, ayudándolas a romper con esa brecha tecnológica.

¿Qué diferencia a Canvas de otras plataformas LMS disponibles en el mercado?

Lo que diferencia a Canvas de otras plataformas LMS es su enfoque en la simplicidad. Canvas fue diseñada, desde sus inicios, por estudiantes que estaban un poco frustrados con su proceso de aprendizaje, y fue creada tanto para estudiantes como para los profesores pensando en facilitar el aprendizaje y no solo la gestión de contenidos.

La experiencia de usuario es excepcional. Tiene una gran flexibilidad y escalabilidad por estar construida en la nube de forma nativa, y tenemos integraciones abiertas a través de Open API y LTI porque Canvas promueve ese ecosistema abierto, integrándose fácilmente con miles de herramientas y contenidos educativos de terceros.

En cuanto a la analítica del aprendizaje, algo muy importante para las instituciones educativas, Canvas ofrece potentes herramientas que realmente permiten a los docentes y a los administradores poder tomar decisiones basadas en datos reales.

La innovación y la accesibilidad también son importantes. Instructure invierte de forma continua en mejorar la plataforma, comprometiéndose con la accesibilidad, la equidad digital y la mejora continua. No es una plataforma para impartir clases; es realmente una herramienta que mejora la enseñanza y la participación, tanto para los estudiantes como para los profesores, y que da también soporte a la transformación educativa.

En España, ¿con qué universidad trabaja Canvas?

En España nos enfocamos más en el sector de la educación superior, pero a nivel global también trabajamos con todo tipo de instituciones educativas, desde primaria y secundaria a Bachillerato, Formación Profesional o estudios superiores. Por poner algunos ejemplos, trabajamos con instituciones como ISDI, Zigurat Global Institute of Technology o la Universidad Francisco de Victoria.

El estudio Digital Maturity Index menciona que el 70 % de las instituciones educativas europeas ya adoptan tecnologías emergentes. ¿Cómo está Canvas contribuyendo a esta transformación y qué retos enfrenta el sistema educativo español para implementarlas?

Desde Instructure estamos viendo con entusiasmo ese 70 % y ese dato confirma que la transformación digital en la educación es una prioridad en España y también en Europa. Canvas está desempeñando un papel muy activo en ese proceso porque actúa como una plataforma abierta, flexible, que está preparada para integrar tecnologías emergentes como la inteligencia artificial u otras como la realidad aumentada, herramientas de evaluación adaptativa o las analíticas de aprendizaje, esto último muy importante para la toma de decisiones.

Además, nuestra arquitectura está basada en la nube con APIs abiertas, lo que permite a las instituciones que se puedan conectar fácilmente con otras soluciones tecnológicas dentro de su ecosistema educativo y sin fricciones. También proporcionamos datos en tiempo real, lo que ayuda a los docentes a personalizar la enseñanza y ayuda a los responsables institucionales a tomar decisiones informadas.

Los retos realmente a los que se enfrenta el sistema educativo español están en las desigualdades en la infraestructura tecnológica entre distintas comunidades autónomas, entre centros públicos y privados o, por ejemplo, en la formación docente, no solo en el uso de herramientas digitales sino en cómo se están integrando pedagógicamente. Vemos que hay una parte de resistencia al cambio, que cuesta dar el paso, pero Canvas busca precisamente facilitar esta transición reduciendo las barreras técnicas y ofreciendo ese soporte continuo a las instituciones para que puedan enfocarse en lo que es más importante para ellos: enseñar y aprender. Por eso nos posicionamos desde un punto de vista que va más allá de una plataforma siendo realmente el partner en tecnología para las instituciones educativas y para que puedan tener ese enfoque en el proceso de enseñanza y aprendizaje.

En el caso de la IA ¿cómo está Canvas utilizando esta herramienta para mejorar la experiencia de los estudiantes? ¿Y para facilitar el trabajo de los docentes y mejorar su interacción con los estudiantes?

En Instructure entendemos que la inteligencia artificial (IA) no es solo una herramienta, sino que es realmente un catalizador estratégico para el futuro de la educación. Nuestra visión con Canvas, como centro del ecosistema de aprendizaje Instructure, es incorporar la IA de forma responsable y ética para que esté alineada realmente con los principios pedagógicos que guían a docentes e instituciones.

Por un lado, la IA sirve de apoyo al aprendizaje humano, pero no es un reemplazo. La IA debe estar al servicio de ese proceso educativo, pero no dirigirlo, sino que es el profesor el que sigue teniendo el poder de decisión. Por eso, nuestra estrategia se basa en crear estos entornos que empoderen a los profesores y a los estudiantes, promoviendo la autonomía, la toma de decisiones informadas y el pensamiento crítico, que sigue siendo muy importante.

En segundo lugar, está la integración ética y transparente, algo clave para las instituciones y para los profesores. Nosotros estamos comprometidos con una implementación de la IA que respete la privacidad, la seguridad de los datos y la equidad. Trabajamos con expertos para toda la parte de gobernanza de datos, para asegurarnos que cada avance tecnológico que integramos tenga un propósito claro y responsable.

Y, por último, la colaboración con el sistema y el ecosistema educativo. No creemos en soluciones que sean impuestas y, por eso, nuestra estrategia de IA se construye junto con universidades, con instituciones educativas, con partners en el sector, para identificar cuáles son esas necesidades reales y crear soluciones que respondan a contextos diversos. Cuando creamos productos, lo hacemos sobre la base también del feedback, de la retroalimentación con instituciones y estas están involucradas en todo ese proceso.

Se ha comprobado que la personalización del aprendizaje, que atiende y se adapta a las necesidades específicas del alumno, es una de las claves del éxito. ¿Qué herramientas específicas ofrece vuestra plataforma para adaptar el aprendizaje a las necesidades y ritmo de cada estudiante?

La personalización del aprendizaje es para nosotros una prioridad estratégica. El mundo cada vez cambia más y creemos que la educación debe adaptarse al estudiante y no al revés. Repensar esos modelos tradicionales de educación cuesta mucho. Por eso, todo el desarrollo de Canvas y los cambios que seguimos haciendo están orientados a permitir esos modelos educativos más flexibles, que sean más inclusivos y estén centrados en el estudiante.

Personalizar no necesariamente significa individualizar tecnológicamente, sino que se puedan crear las condiciones para que cada estudiante pueda avanzar a su propio ritmo con recursos, apoyos y oportunidades. Y eso significa, por un lado, empoderar a los docentes con la información que sea útil y las herramientas intuitivas, como es el caso de Canvas, para que puedan tomar decisiones pedagógicas adaptadas y sin depender exclusivamente de automatismos.

También buscamos que, dentro de las instituciones, se pueda promover esa cultura de aprendizaje centrada en el estudiante, donde la tecnología sea un facilitador de itinerarios flexibles de aprendizaje, que fomente la autonomía y asegure la equidad. No dar lo mismo a todos, sino aquello que cada uno necesita para aprender. Canvas no persigue la personalización como una función aislada en la plataforma, sino como una filosofía en el diseño pedagógico orientada a crear ecosistemas de aprendizajes que evolucionen junto a las necesidades de cada institución.

Uno de los principales retos en educación es la brecha educativa. ¿De qué manera Canvas contribuye a eliminar esta brecha, especialmente en términos de personalización del aprendizaje y acceso a contenidos?

Reducir la brecha educativa es un compromiso central para Instructure. Nacimos con la misión de educar, independientemente del lugar y de las posibilidades y, desde Canvas, trabajamos para que la tecnología contribuya a una educación más equitativa y no más excluyente.

Estamos apostando por un acceso inclusivo que garantice que todos los estudiantes puedan conectar, participar y aprender sin barreras. Nuestra visión es clara, queremos una educación de calidad que esté al alcance de todos y una tecnología que, bien utilizada, es una palanca bastante poderosa para hacerlo posible.

¿Cuáles son algunos de los casos de éxitos de éxito más destacado de Canvas en otros países? ¿Y cómo planean aplicar esas lecciones de esos casos de éxito aquí en España?

Cada país es diferente y cada institución educativa tiene necesidades distintas, pero tenemos muchas instituciones con casos de éxito en Estados Unidos, en el Reino Unido o en Australia. Universidades de todos los tamaños que implementan Canvas para poder ofrecer estas experiencias de aprendizaje más flexibles basadas en el análisis de datos. Un ejemplo reciente lo tenemos en el Reino Unido con la Universidad de Manchester, donde están liderando todo un programa para apoyar iniciativas dentro de la ciudad de Manchester y ser líderes en aprendizaje a lo largo de la vida.

Eso requiere contar con esta tecnología y que sea segura, moderna, que les permita escalar rápidamente y ofrecer un acceso continuo al Sistema de Gestión de Aprendizaje o LMS, por sus siglas en inglés, sin que se caiga durante las actualizaciones, como sí ocurre con otros muchos sistemas más tradicionales. En este caso, para la Universidad de Manchester, la idea de este proyecto de educación a lo largo de la vida es poder ofrecer también micro credenciales para apoyar todo ese proceso de upskilling y reskilling, de lo cual se está hablando muchísimo en España también y donde ya estamos acompañando a varias instituciones en ese proceso.

Mirando al futuro, ¿cómo ves la educación dentro de cinco años y qué papel jugará Canvas en ese cambio?

En los próximos años habrá una transformación profunda de la educación impulsada por estas experiencias de aprendizaje personalizado y por ese creciente reconocimiento de habilidades que van más allá de los títulos tradicionales, y de ahí las micro credenciales respaldadas también por credenciales digitales.

Con Canvas ya estamos trabajando esa evolución con muchas instituciones al integrar herramientas como la IA y el análisis de datos. Creamos contenidos que evolucionan hacia un aprendizaje más autodirigido y potenciado por la IA, pero donde el profesor y el alumno siguen siendo los que toman la decisión de cómo utilizar estas herramientas. Eso permite a los educadores centrarse más en ayudar a los estudiantes a entender conceptos más complejos, y hacer un acompañamiento más individual del estudiante.

Otro de los aspectos a futuro será el poder ir más allá de los exámenes tradicionales y que podamos aportar otras formas de medición del aprendizaje que sean más activas, más auténticas, más significativas y que estén más alineadas con las nuevas generaciones y con las tendencias del momento sobre cómo captar la información y la rapidez de uso de ese contenido.