Coro López-Barrón, Directora de la Cámara de Comercio Hispano Portuguesa
Dado el crecimiento económico destacado de la península ibérica superior al de la eurozona, ¿cómo planea la Cámara aprovechar este dinamismo para fomentar más sinergias empresariales?
Ante el destacable crecimiento económico de la Península Ibérica y el interés por las relaciones bilaterales entre España y Portugal, la Cámara de Comercio Hispano Portuguesa está ampliando su enfoque hacia la creación de una plataforma de innovación y colaboración transfronteriza.
En este sentido, la cámara diseña y ejecuta una potente e interesante agenda con destacados eventos que reúne a los entramados empresariales de ambos países, así como a instituciones públicas y privadas, con el objetivo de potenciar las relaciones y provocar sinergias. Al mismo tiempo y de modo particular, realiza encuentros entre nuestros socios, facilitando las oportunidades de negocio entre empresas portuguesas y españolas.
Finalmente, de cara a potenciar este dinamismo, estamos innovando en nuestros métodos de colaboración a través de la diversificación de formatos de iniciativas hacia otros sectores además del empresarial, como el ámbito cultural, juvenil y social.
¿Cómo está influyendo la colaboración entre los hubs tecnológicos de Portugal y España en el panorama empresarial?
La colaboración entre los hubs tecnológicos en ambos países está catalizando una transformación profunda en el panorama empresarial, caracterizada por una ola de digitalización y startups innovadoras.
Madrid Hub y UPTEC en Oporto están liderando esta dinámica, atrayendo inversión extranjera y creando una red robusta para el intercambio de ideas y recursos. Por otro lado, programas específicos, tales como aceleradoras «Lisbon Challenge» y «Barcelona Activa», están permitiendo que startups de ambas naciones escalen de forma rápida y efectiva, potenciando así su competitividad global.
¿Cuál es el papel de la Cámara en la implementación de los fondos europeos y cómo esto podría afectar el crecimiento económico de España y Portugal en 2024?
Nuestra Cámara actúa como un puente esencial entre los fondos europeos y las empresas locales, asegurando que nuestros miembros estén informados de las oportunidades disponibles, sino que también estén equipados para aprovecharlas. A medida que más empresas se beneficien de estos recursos, esperamos ver un impulso significativo en el desarrollo de infraestructuras críticas y proyectos de innovación, lo que a su vez debería contribuir al crecimiento económico de la región en 2024.
¿Cómo está ayudando la Cámara a sus empresas miembro a adaptarse al cambiante entorno económico europeo?
La adaptación al cambiante entorno económico europeo es primordial para nuestras empresas miembro, y nuestra Cámara desempeña un papel clave en este proceso. Además de proveer información actualizada y asesoramiento jurídico específico y estratégico, facilitamos el acceso a una red de contactos y encuentros empresariales que suponen el establecimiento de contactos comerciales entre empresas españolas, portuguesas y de otros países europeos. También se ofrecen programas de capacitación enfocados en competencias de áreas clave como la fiscalidad, contabilidad y gestión laboral, cruciales para la internacionalización de nuestras empresas.
¿Qué nuevas iniciativas podemos esperar que se produzcan entre las empresas españolas y portuguesas en el medio plazo?
Portugal, al igual que España, está viendo cómo las industrias tradicionales se están transformando para incorporar tecnología, generando actividades relacionadas con sectores de alta tecnología como IA y la robótica, al tiempo que tenemos intereses compartidos en las energías renovables, la industria del automóvil e incluso la economía azul.
Entendemos por tanto que son los sectores donde aumentarán los intercambios en las distintas etapas productivas y comerciales, generando iniciativas de colaboración entre empresas españolas y portuguesas y nuevas oportunidades de mercado.
Por otro lado, las empresas deberán contribuir conjuntamente al fortalecimiento de las capacidades industriales de Europa y así poder responder efectivamente a las necesidades de los ciudadanos. Lo que definitivamente implicará un aumento en las relaciones comerciales entre los miembros de la UE, y por tanto, reforzará las relaciones económicas entre España y Portugal.