Ernesto Antolín, Presidente de Antolin
Al celebrar más de 70 años de historia y con la segunda generación al mando, ¿cómo ha influido la gestión familiar en la visión de Antolin?
Antolin es una historia de éxito. Comienza en Burgos, a principios de los años cincuenta del siglo pasado, cuando la familia Antolin funda la que hoy es una multinacional reconocida en todo el mundo. En estos años, hemos evolucionado mucho y seguimos haciéndolo; ahora precisamente estamos inmersos en una nueva etapa de nuestra historia con un importante proceso de transformación que buscar liderar la movilidad del futuro sin olvidar nuestra esencia y orígenes.
En esta constante evolución, el espíritu familiar es, sin duda, una de nuestras señas de identidad. No en vano, desde la dirección de Antolin siempre se han fijado unas bases en la relación con los clientes, empleados y resto de stakeholders que tienen que ver con la honradez a la hora de actuar, la transparencia, y el respeto por los demás y la diversidad en el día a día de una organización multinacional y, por tanto, multicultural, con alrededor de 24.000 empleados, que está presente en 25 países.
Todos los logros los hemos conseguido gracias a nuestro afán por innovar, que emana del espíritu que nos marcaron los dos fundadores, mi padre Avelino y mi tío José, y que ha alentado a toda la familia. Y todo basado en un increíble equipo humano que ha sabido consolidar un modelo de negocio sostenible, aupado sobre la internacionalización y la gestión inspirada en la excelencia. Esta suma de inconformismo, talento, esfuerzo y visión a largo plazo ha llevado a Antolin hasta lo que es hoy en día.
No hay que olvidar que Antolin sigue siendo una empresa propiedad al 100 % de la familia fundadora, pero con una gestión totalmente profesionalizada desde hace tiempo.
¿Cuál ha sido la estrategia principal de Antolin para haberse consolidado como uno de los mayores fabricantes de soluciones para el interior del vehículo del mundo?
La constante búsqueda de la calidad con un enfoque basado en la innovación permanente para aportar productos tecnológicos de alto valor añadido a nuestros clientes ha sido y es, sin duda, la clave, máxime en un sector tan competitivo como el nuestro. Durante el último año hemos redefinido la estrategia de la compañía para basarla más en la orientación al cliente y el incremento de valor mediante la combinación de aspectos de eficacia y eficiencia.
Calidad en Antolin implica mejorar la robustez de los desarrollos y asegurar operaciones eficientes en la cadena de suministro, así como consolidar la cultura de calidad en toda la organización y fomentar la mejora total y continua.
La estrategia de Antolin no puede entenderse sin su ecosistema de innovación. La compañía forja alianzas con socios estratégicos para proporcionar una nueva generación de soluciones avanzadas. Innovación abierta, cooperación y transferencia de conocimiento componen un triángulo virtuoso del que forman parten empresas, start-ups y centros de innovación.
Además de crear nuevas soluciones y productos, estas alianzas contribuyen a introducir mejoras en los procesos industriales para optimizar la competitividad e incorporar inteligencia en nuestras plantas gracias al uso de tecnologías de terceros.
Ha hablado de innovación como una palanca clave de crecimiento todos estos años. ¿Cuáles considera que son los proyectos más prometedores para el futuro próximo?
Hacer evolucionar nuestra cartera de productos y soluciones es uno de los objetivos del plan de transformación y, para eso, la innovación es un pilar esencial. La fortaleza de Antolin es que tenemos la capacidad tecnológica para ofrecer a los clientes el portfolio más completo del mercado incluyendo una nueva generación de soluciones avanzadas que cambiarán por completo el espacio interior de un vehículo. Destacaría, por ejemplo, proyectos centrados en la investigación y el desarrollo de nuevas funcionalidades para enriquecer las sensaciones de confort, salud y bienestar en el vehículo. También soluciones de seguridad y asistencia a la conducción relacionadas con la iluminación y la implementación de nuevos sistemas para la monitorización del conductor.
Otra línea de investigación tiene que ver con tecnologías de Human Machine Interface (HMI) que permiten un control más intuitivo y seguro de las funciones del vehículo empleando tanto pantallas avanzadas como superficies inteligentes.
Y, por supuesto, todo lo relacionado con la sostenibilidad del automóvil, que es algo prioritario para la industria. Desde el empleo de materiales naturales o reciclados al desarrollo de piezas más ligeras que ayuden a nuestros clientes a reducir las emisiones de sus coches. La innovación y el desarrollo tecnológico son la base para el crecimiento sostenible futuro de la compañía.
Asia ha sido destacada como una “apuesta de futuro” para Antolin. ¿Qué planes tiene la empresa para expandirse aún más en este mercado? ¿Qué supone esto respecto al más lento crecimiento del mercado europeo?
Para Antolin, Asia va a ser un importante foco de crecimiento futuro por el potencial que ofrece respecto a mercados más maduros para nosotros, como Europa, y porque se trata de una región muy dinámica que está liderando la nueva tecnología eléctrica. Queremos aumentar el negocio de Asia para que represente alrededor del 20 % de las ventas a largo plazo..
En China, tenemos proyectos con fabricantes occidentales y con marcas emergentes chinas, muchas de ellas eléctricas, con una variedad de soluciones y tecnologías, como programas muy innovadores de iluminación inteligente que ofrecen al usuario una nueva experiencia a bordo. El otro pilar es India, donde el año pasado inauguramos la nueva oficina de Diseño Global y de Negocio en Pune, que nos ha permitido adaptarnos mejor y más rápido a las necesidades y requerimientos específicos de los clientes allí. En Japón, sellamos recientemente un acuerdo comercial con el proveedor japonés Moriroku que nos permitirá desarrollar proyectos de paneles de instrumentos y consolas centrales para Toyota en ese mercado.
Por mi experiencia de muchos años con Asia, se trata de una región pujante y líder en el mundo, y que, sin duda, supone un reto para las empresas del sector, que deben estar allí ubicadas para seguir el alto ritmo de avance tecnológico de esa región. Por consiguiente, Europa, como mercado más maduro, debe hacer un esfuerzo extra para adaptarse al futuro de cara a seguir siendo competitiva en la transformación hacia la movilidad eléctrica, donde el empuje de las marcas chinas es alto.
Dada la mejora de posición en clasificaciones de sostenibilidad, ¿cuál es el próximo objetivo en términos de sostenibilidad para Antolin?
Estamos muy satisfechos por la mejora que hemos logrado en algunos de las principales clasificaciones internacionales en materia de sostenibilidad como The Moody’s ESG Solutions, S&P global o Carbon Disclosure Project. Es una muestra de que vamos por el buen cambio en nuestro compromiso por avanzar en la sostenibilidad y responsabilidad de nuestro negocio. Queremos ser un referente en los asuntos materiales que preocupan a nuestros grupos de interés, como la gestión ambiental, la ética, los derechos humanos, la seguridad de la información o la sostenibilidad de la cadena de suministro.
Las organizaciones tenemos una responsabilidad a la hora de construir un mundo más justo y hacer frente a la emergencia climática.
Además, en nuestro negocio hay una tendencia clara: en la nueva movilidad, el vehículo es el reflejo de un nuevo consumidor que no solo busca desplazarse de un punto a otro, sino que aspira a que esa experiencia sea coherente con sus valores y su visión del mundo. Por tanto, además de los atributos habitualmente considerados (asequibilidad o comodidad), también exige a los fabricantes compromiso con la sostenibilidad. Nosotros, como socio clave de los fabricantes de vehículos, somos un actor esencial en la reducción de la huella de carbono de la industria y en ofrecer un vehículo más respetuoso con el medio ambiente.
Por lo que respecta a nuestras operaciones, vamos a seguir con los proyectos que nos permitirán reducir las emisiones con la ambición de alcanzar la neutralidad total en 2040, así como en el impulso de la circularidad de nuestro negocio.
Aquí tienes el texto con la alineación horizontal y las preguntas separadas con saltos de línea:
¿Cómo espera que la digitalización y conectividad transformen la experiencia del automóvil en la próxima década?
El vehículo va a cambiar en los próximos años mucho más de lo que lo ha hecho en sus más de cien años de historia. Hay un sinfín de nuevas tecnologías que van a llegar al coche aprovechando la conectividad y la digitalización. El resultado es que los pasajeros no solo van a notar mejorías en temas de seguridad y confortabilidad, en los que la industria lleva décadas trabajando, sino también en la propia experiencia de viaje. Estamos hablando de un vehículo que no solo será un mero medio de transporte sino un espacio sostenible y avanzado que ofrecerá nuevas funciones de entretenimiento o para el trabajo y en el que se podrá interactuar con el medio, otros vehículos y la propia infraestructura aprovechando el potencial de la Inteligente Artificial.
Solo citaré algunos ejemplos en los que está trabajando Antolin. Estamos desarrollando junto a varios socios tecnológicos un Sistemas de Acceso al Vehículo que permite, mediante la voz o el reconocimiento facial, acceder al automóvil o incluso arrancarlo. Este proyecto fue premiado en la pasada edición de la feria de electrónica de consumo CES Las Vegas 2023. Otro interesante ejemplo de la transformación que vive el vehículo es nuestro proyecto Genius. A través de un sistema de sensores instalado en la cabina de vehículo, se monitoriza, analiza e interpreta el estado cognitivo y emocional del usuario y, en función del estado identificado, se puede mejorar la experiencia del pasajero a partir de estímulos externos como la iluminación, el sonido o los aromas. El potencial de todas estas nuevas tecnologías es enorme y la meta es ofrecer un vehículo inteligente que se ajuste automáticamente a las necesidades puntuales de cada persona.