Apple invertirá 100.000 millones en EE. UU. para evitar nuevos aranceles de Trump
Actualidad | Empresa | Finanzas | Redacción | 07/08/2025

Presión arancelaria y respuesta estratégica
Apple ha anunciado una nueva inversión de 100.000 millones de dólares para ampliar su producción en Estados Unidos. El objetivo es evitar los aranceles punitivos que el presidente Donald Trump planea imponer a productos tecnológicos como los iPhones. La medida se enmarca en el nuevo programa de fabricación nacional anunciado este miércoles en la Casa Blanca, que busca trasladar parte de la cadena de suministro de Apple al país.
Reforzar la agenda industrial de EE. UU.
La Casa Blanca ha valorado este movimiento como una «victoria» para la industria nacional.
“La agenda económica ‘EE. UU. Primero’ ha asegurado billones de dólares en inversiones que apoyan el empleo estadounidense”, señaló el portavoz Taylor Rogers.
La inversión eleva el compromiso total de Apple en EE. UU. a 600.000 millones de dólares en los próximos años, frente a los 500.000 millones previamente anunciados.
Impacto de los aranceles y amenaza de nuevos gravámenes
Trump ha advertido que, si Apple no traslada la producción de iPhones a EE. UU., se enfrentará a aranceles del 25%. Además, el presidente ha anunciado que impondrá aranceles de “aproximadamente” el 100% a las importaciones de chips y semiconductores. Apple ya ha sufrido un impacto de 800 millones de dólares por los aranceles existentes, cifra que podría subir hasta 1.100 millones en el tercer trimestre.
Una reindustrialización difícil y costosa
Durante una llamada con analistas, el consejero delegado Tim Cook explicó que la mayoría de los iPhones vendidos en EE. UU. se fabrican en India, y el resto de productos en Vietnam. Volver a fabricar en territorio estadounidense implicaría desmantelar plantas en Asia y reconstruir toda la cadena desde cero, lo que supondría un gasto de miles de millones de dólares.
Relación con Trump y competencia global por la inversión
Cook ha mantenido reuniones privadas con Trump para obtener exenciones arancelarias, y asistió a su segunda toma de posesión junto a líderes tecnológicos como Elon Musk, Sundar Pichai o Mark Zuckerberg. Trump ha vinculado la política arancelaria a compromisos de inversión de otros países: la UE habría prometido 600.000 millones de dólares y Japón, 550.000 millones. Sin embargo, ambas partes matizan que no se trata de dinero nuevo, sino de continuidad de inversiones privadas ya existentes, algo que el presidente estadounidense rechaza.