Casa Tarradellas registra un aumento del 8,5 % en 2022, aproximándose a los 1.200 millones

Casa Tarradellas eleva su facturación de 1.161 millones de euros en 2022, lo que supone un incremento del 8,5%. Situada en Gurb (Osona), la empresa fue fundada y es actualmente presidida por Josep Terradellas Arcarons.

Este aumento señala un notable progreso respecto al 2021, año en el que experimentaron un modesto crecimiento del 1%. Estas cifras reflejan una recuperación del impacto del Covid-19 en el 2020, cuando lograron un crecimiento del 8% en ventas, impulsado en gran medida por la demanda en el sector alimenticio. Cabe mencionar que estos números no contabilizan las operaciones de Herta Foods, una compañía francesa en la que Casa Tarradellas posee el 60% y Nestlé, la firma suiza, el 40% restante.

Con una amplia gama de productos, desde pizzas refrigeradas hasta el conocido Espetec, la consolidación de Casa Tarradellas en España y su expansión internacional son factores claves detrás de este crecimiento. El reciente estudio de la consultora Kantar coloca a la marca entre las diez más preferidas por los españoles.

El 2022 vio a la empresa innovar con el lanzamiento de pizzas con masas de fermentación lenta, añadiendo variedad a su ya popular línea de pizzas refrigeradas que debutaron en 1996. Paralelamente, la firma invirtió 32,6 millones de euros en tecnología y sostenibilidad. Sin embargo, el año pasado también registró una reducción en los beneficios netos en comparación con 2021.

A pesar de los desafíos como el aumento en los precios de la electricidad y materias primas, Casa Tarradellas optó por absorber estos costes adicionales, evitando trasladar la totalidad del impacto al consumidor. Los beneficios obtenidos en 2022 serán reinvertidos en la empresa y en nuevas inversiones que garanticen su competitividad a futuro. Destacan iniciativas como el desarrollo de nuevos productos y un centro destinado a aumentar la producción de harina, así como una firme apuesta por la energía renovable.

En sintonía con la sostenibilidad, la empresa ha inaugurado dos parques fotovoltaicos en Olost y Gurb. Con una superficie total de 53.000 metros cuadrados, buscan expandirse a 200.000 metros cuadrados de paneles solares hacia finales de año, una meta que, según la portavoz del grupo, Miquelina Saborit, permitirá a Casa Tarradellas «incrementar su autonomía energética y depender más de las energías limpias».