El Barómetro Económico, pesimista sobre la economía española en 2024

Un reciente estudio llevado a cabo por el Consejo General de Economistas ha arrojado luz sobre las expectativas económicas para España en el primer semestre de 2024, revelando un pronóstico mayoritariamente pesimista. El ‘Barómetro Económico’ del segundo semestre de 2023, basado en una encuesta a economistas colegiados de toda España, indica que un 76,4% de los profesionales anticipa un deterioro de la economía nacional.

Este sentimiento negativo se ve reforzado por la percepción de que la formación del nuevo Gobierno podría tener un impacto desfavorable en el crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) este año, con un 77% de los encuestados compartiendo esta visión. Según la encuesta, casi tres de cada cuatro economistas consideran que las condiciones económicas de España se han deteriorado en la segunda mitad de 2023 en comparación con los seis meses anteriores.

El contexto actual, caracterizado por una elevada incertidumbre, un crecimiento económico global más lento, inestabilidad geopolítica y las políticas monetarias restrictivas del Banco Central Europeo, ha influido en la expectativa negativa para los próximos meses. La mayoría de los encuestados expresan desconfianza en la evolución a corto plazo de la economía española, anticipando una situación aún más complicada en comparación con la actualidad.

Valentín Pich, presidente del Consejo General de Economistas de España, ha destacado la necesidad de considerar las opiniones de los economistas en la elaboración de los próximos presupuestos generales del Estado, especialmente en lo que respecta a la política fiscal y los costes laborales. Pich ha subrayado el aumento de impuestos y cotizaciones sociales en España desde 2019, señalando que la presión fiscal recae principalmente en las clases medias debido a la estructura de la economía española.

La encuesta también revela que casi nueve de cada diez economistas creen que el endurecimiento de las políticas monetarias tiene un impacto negativo en el crecimiento de España, mientras que los conflictos y tensiones geopolíticas actuales también son vistos como factores que influyen negativamente en la economía.