El Tesoro coloca 6.142 millones en deuda a medio y largo plazo

El Tesoro Público español ha logrado colocar un total de 6.142,77 millones de euros en la última subasta de bonos y obligaciones del Estado del mes de abril, alcanzando el rango alto de sus previsiones. En esta ocasión, ha aumentado la rentabilidad ofrecida a los inversores, lo que ha mantenido el elevado interés del mercado por los títulos españoles. La demanda total ha alcanzado los 12.558 millones de euros, reflejando un fuerte apetito por la deuda pública española.

En detalle, se han subastado bonos y obligaciones de diferentes plazos y cupones. Los bonos del Estado a 3 años con un cupón del 2,50% se colocaron por 1.500 millones de euros, con un interés marginal del 2,992%, que representa un incremento respecto al 2,899% de la subasta anterior. Las obligaciones a 10 años, con un cupón del 3,25%, alcanzaron los 2.074,69 millones de euros colocados, con una rentabilidad marginal del 3,255%, también superior al 3,196% anterior.

Asimismo, se colocaron 1.533,14 millones de euros en obligaciones con una vida residual de 6 años y 3 meses, con un cupón del 1,95% y un interés marginal del 2,956%, y 1.034,94 millones de euros en obligaciones con una vida residual de 42 años y 3 meses, con un cupón del 3,45% y una rentabilidad marginal del 3,876%, ambos aumentos respecto a las cifras anteriores.

Además, el Tesoro Público realizó una subasta de letras a tres y nueve meses el pasado martes, captando 2.050,6 millones de euros, también dentro del rango medio de sus objetivos y con tipos ligeramente inferiores a los de la subasta anterior.

El programa de financiación del Tesoro para 2024 proyecta necesidades de financiación nueva de aproximadamente 55.000 millones de euros, una reducción de 10.000 millones respecto a 2023. La emisión bruta planificada es de 257.572 millones de euros, un 2% superior al año anterior debido al aumento de las amortizaciones.

Dentro de la estrategia del Tesoro para este año se incluye la utilización de sindicaciones para la emisión de determinadas referencias y la continuación de la diversificación de la base inversora, incluyendo la emisión de bonos verdes, fortaleciendo así el mercado de finanzas sostenibles.