España, en período de elecciones
Actualidad | España | Gerard Muñoz | 18 de febrero de 2019
Tras la reciente convocatoria de elecciones generales por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para el próximo 28 de abril, España entra en un periodo extraordinario de elecciones en el que se dirimirá el futuro de nuestro país en tan solo un mes.
Los españoles estamos convocados a decidir en la primera cita electoral, el 28 de abril, el partido que deberá afianzar la recuperación económica de España y solucionar las consecuencias de la crisis que todavía afectan a la clase media y con menos ingresos del país. Resolver el conflicto planteado en Cataluña también deberá ser una de las prioridades del futuro gobierno resultante, optando por la aplicación de un nuevo 155 o apostar por el diálogo con los independentistas, hasta ahora fallido.
Pero ¿cuánto cuestan unas elecciones generales? Si las generales se hubieran convocado en el llamado “superdomingo” del 26 de mayo de 2019, esto hubiera supuesto un ahorro presupuestario, ya que los gastos estructurales serían compartidos con las Elecciones Autonómicas, Locales y Europeas que se celebran de forma simultánea. Pero los detractores de este “superdomingo” consideran que las Elecciones Generales deben celebrarse de forma única y sin coincidir con otras elecciones, ya que es una forma de realzar su importancia.
El Gobierno de Sánchez ya había reservado 302,9 millones de euros en los presupuestos para las distintas citas electorales previstas este 2019, a lo que ahora se añaden las elecciones generales. En concreto, organizarlas tendrá un coste de 130 millones de euros (en concepto de gastos de organización) y 45 millones en subvenciones electorales concedidas a los partidos que concurrirán a ellas. Este fue el presupuesto que representó al Estado las últimas elecciones generales, celebradas el 26 de junio de 2016.
De los 130 millones por gastos de organización, 48 son para Correos (voto por correo y buzoneo o propaganda electoral); 12,8 se destinan a escrutinio y difusión de datos; y 12,5 a logística. Los otros 55 millones se comprometen a gastos de las administraciones públicas e incluyen costes como el despliegue de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. El resto del presupuesto se destina a las subvenciones de los partidos para que paguen sus campañas electorales.
El Gobierno deberá reajustar las partidas de gasto para afrontar los importes que habrá que acometer con motivo de las distintas citas electorales de 2019.