FCC obtiene luz verde para construir túnel cerca de Stonehenge

Empresa | 21 de febrero de 2024

La empresa constructora española FCC, en colaboración con la italiana WeBuild y la alemana BeMo Tunnelling, ha recibido autorización para proceder con la construcción de un túnel cerca del histórico sitio de Stonehenge en el Reino Unido, tras una decisión judicial que desestimó las objeciones presentadas por grupos de conservación. El proyecto, valorado en 1.250 millones de libras (aproximadamente 1.460 millones de euros), contempla la creación de un túnel de 3,3 kilómetros de longitud, a 40 metros de profundidad y a 200 metros de distancia del emblemático yacimiento arqueológico.

La campaña contra el proyecto fue liderada por la organización Save Stonehenge World Heritage Sites, que argumentaba que el Gobierno británico no había evaluado adecuadamente los riesgos para el monumento neolítico, el impacto potencial sobre el cambio climático ni considerado alternativas viables. Sin embargo, tras una audiencia celebrada en diciembre, el tribunal concluyó que el proceso para otorgar la autorización DCO por parte del Ministerio de Transportes había cumplido con los requisitos necesarios, despejando así el camino para FCC y sus socios.

El proyecto también incluye un tramo de 13 kilómetros de autovía entre Amesbury y Berwick Down, además del túnel. National Highways, el organismo público responsable de la licitación, ha asegurado que el diseño del túnel tiene como objetivo preservar los espacios arqueológicos circundantes y minimizar la contaminación visual, especialmente durante la puesta de sol en el solsticio de verano, vista desde los megalitos. Se estima que la construcción del proyecto durará alrededor de cinco años.

El Reino Unido representa un mercado estratégico para FCC, que actualmente participa en otros proyectos significativos en el país, incluyendo una propuesta para renovar el acueducto de Haweswater (HARP) en Mánchester, con un contrato valorado en 2.000 millones de libras, y la construcción de una autovía en Gales por 650 millones de libras.