La inflación en España cae al 3,2 % impulsada por la reducción en precios de combustibles y alimentos

Actualidad | 29 de noviembre de 2023

El Índice de Precios de Consumo (IPC) en España se ubicó en el 3,2% interanual en noviembre, una disminución de tres décimas respecto a octubre, según el Instituto Nacional de Estadística (INE). Esta disminución está influenciada principalmente por la reducción en los precios de combustibles y alimentos. La inflación subyacente, que excluye alimentos no elaborados y productos energéticos, descendió siete décimas, llegando a 4,5%, lo que representa su nivel más bajo desde abril de 2022 y se sitúa a 1,3 puntos del indicador general.

El IPC anticipa un aumento en las pensiones del 3,8% para 2024, basándose en el dato de noviembre. La inflación general muestra una disminución tras haberse mantenido estable en 3,5% en los últimos dos meses. Los factores influyentes incluyen la estabilización de los precios de la electricidad y la disminución en los costos de los carburantes. Sin embargo, los precios de los alimentos aún se mantienen altos, anclados en un 9,5%.

Este mes, el abaratamiento de los carburantes y los paquetes turísticos han contribuido significativamente a la reducción del índice, mientras que la moderación en los precios de los alimentos ha proporcionado alivio a los consumidores antes de la temporada navideña.

La tasa de inflación subyacente cae a 4,5%, alcanzando mínimos desde abril de 2022 y marcando una diferencia de 1,3 puntos con respecto al IPC general. En cuanto a la evolución de precios en tasa intermensual, se observa una moderación significativa, siendo la mayor caída desde septiembre de 2022.

El INE también reporta que la inflación armonizada (IPCA) se situó en el 3,2% y que la variación mensual estimada del IPCA fue del -0,6%. La vicepresidenta primera y ministra de Economía, Nadia Calviño, destaca que la inflación general baja, impulsada por la electricidad, los carburantes y los alimentos, lo que favorece tanto a los salarios como a la competitividad de las empresas españolas.

Los analistas ven en estos datos una señal positiva de moderación general en el aumento de precios, incluso teniendo en cuenta un entorno complejo y volátil, especialmente en lo referente a la energía. Estos indicadores podrían influir en la próxima reunión del Banco Central Europeo, sugiriendo una política monetaria más flexible en términos de tipos de interés y un enfoque más centrado en la evolución económica.