Entrevista CEDE
IWF Internacional es una asociación internacional de mujeres líderes para promover el liderazgo femenino y abogar por la equidad de género globalmente. Fundada en Estados Unidos en 1974, es la única organización capaz de mantener esa gran red de relaciones entre mujeres de nivel ejecutivo en el ámbito global. A la red se accede únicamente por invitación sobre las bases de haber demostrado liderazgo y compromiso con dicho propósito. El capítulo español de IWF fue establecido en 2003 y cuenta con 120 asociadas que han conseguido demostrar su liderazgo en la empresa y la sociedad española.
Se ha hablado mucho de retroceso en materia de igualdad a raíz de los efectos de la pandemia, sobre todo en el entorno laboral. ¿Qué valoración hace usted al respecto?
Según el Global Gender Gap Report 2021, publicado por el Foro Económico Mundial, el cierre de la brecha de género mundial ha aumentado desde 99,5 años hasta 135,6 años debido a la pandemia. Es decir, que, si en 2020 se estimaba que se conseguiría la igualdad dentro de 99,5 años, ahora se estima que serán necesarios casi 36 años más. En dicho índice se demuestra claramente que globalmente las mujeres seguimos infra-representadas en los niveles ejecutivos, académicos y políticos y se incide en que la epidemia COVID, al descargar sobre las mujeres responsabilidades extra en el cuidado de la casa y de los hijos, ha supuesto un retroceso para la mujer en el terreno laboral, especialmente en los países menos desarrollados.
¿Cuál la situación de las mujeres en el entorno empresarial actual, y cuáles son los deberes que aún debe realizar el entorno empresarial español en materia de igualdad?
De nuevo es importante ver los datos y su evolución. Si bien se ha avanzado bastante en la presencia de mujeres en los consejos de Administración, todavía hay espacio de mejora. En el X Informe de Mujeres en el IBEX, elaborado por la consultora ATREVIA junto a IESE, se ve que las mujeres en consejos Ibex-35 representan un 33,94 %, lo que supone un crecimiento de 2,77 puntos respecto del año pasado. En el IGBM, la participación de mujeres en los consejos baja hasta 28,7 %, lo que dificulta la posibilidad de la paridad del 30 % en 2023, cuando la CNMV pide un 40 %. En las posiciones directivas, la situación es peor. En las empresas del Ibex 35, solo el 18,32 % de los comités ejecutivos del Ibex 35 son mujeres y hay gran carencia de mujeres presidentes y consejeras delegadas, con solo dos presidentas y una consejera delegada en todo el selectivo.
¿Qué iniciativas tiene IWF para promover el liderazgo femenino?
Diversas investigaciones confirman que hay, entre otras, tres barreras que limitan el potencial de las mujeres líderes: acceso limitado a redes, falta de mentores, e inadecuada formación en liderazgo. Por ello, los programas educacionales y de desarrollo de liderazgo de IWF se enfocan en resolver estas tres barreras para ayudar a las mujeres más talentosas a maximizar su potencial.
• A través de las Leadership Conferences, que se celebran dos veces al año y que tratan temas cruciales para el mundo desde la perspectiva de las mujeres.
• A través de nuestro Leadership Foundation, organización creada por IWF en 1994, apoyamos a mujeres de alto potencial a través de programas de becas de desarrollo de liderazgo como el “Fellow Program”.
• A través de acciones particulares de mentoring de los capítulos locales. Por ejemplo, en España en 2020 hemos firmado un amplio acuerdo de colaboración entre EY-IWF, Aprende con #EYas, bajo el que se han definido varias actividades para empujar el liderazgo femenino en su organización.
Además, organizamos debates con los mejores especialistas y workshops de liderazgo. Dichas actividades y dichos programas no solo contribuyen a nuestro desarrollo, sino que nos ayudan a ampliar y consolidar nuestra red profesional. Está demostrado que la capacidad de networking entre mujeres es un predictor de la capacidad de una mujer de alcanzar puestos directivos.
¿Qué supone para IWF formar parte de CEDE?
Para IWF, CEDE es un aliado para amplificar nuestro mensaje y hacer que llegue a todos los directivos españoles. Trabajar por el liderazgo femenino es un trabajo colectivo que necesita un cambio de mentalidad y un compromiso en toda la sociedad y CEDE nos facilita enormemente ese trabajo de difusión y sensibilización.
Para terminar, ¿qué podemos hacer como sociedad respecto al avance de la igualdad en los próximos años?
Es necesario continuar con las políticas y medidas actuales para promover la igualdad, tales como los planes de formación y mentoring dentro de las empresas, pero también seguir trabajando en el cambio de mentalidad y esto se consigue actuando a dos niveles, con ejemplos de mujeres lideres que lleguen a toda la sociedad y ayudando a las mujeres a creer más en sí mismas. A veces lo que llamamos el sticky floor, que nos ponemos a nosotras mismas, nos frena más que el llamado techo de cristal. El consejo que les daría a las mujeres jóvenes es que sean ellas mismas y no se pongan límites. A la sociedad en general, empresas, ONGs, instituciones, les pediría trabajar más aún para ofrecer la máxima visibilidad a todas aquellas mujeres que marcan la diferencia.
Las historias también nos ayudan a cambiar el mundo. Y, por último, es necesario que hombres y mujeres entiendan que la agenda de igualdad es una causa común.