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Dositeo Amoedo es presidente de la Asociación de Educadores y Planificadores Financieros, una institución española que se dedica a ofrecer educación financiera en la modalidad de asesoría objetiva de acuerdo con los criterios de la OCDE

Recientemente tuvimos la noticia de múltiples afectados denunciando al Defensor del Pueblo la pérdida de su ahorro e inversiones en criptomonedas ¿Qué considera que puede faltar en España para protegerse de estas estafas cada vez más frecuentes?

Lo primero un marco legal que regule y supervise los emisores y proveedores de servicios de criptoactivos para proteger a los consumidores, y en segundo lugar información y educación financiera de calidad. 

En septiembre de 2020, la Comisión Europea presentó una propuesta legislativa de reglamento sobre el mercado de criptoactivos. Esta norma, en trámite en el Parlamento Europeo a día de hoy, pretende regular la supervisión de este mercado y proteger a los consumidores, esto quiere decir que hasta que no se apruebe la desprotección es total. Si una persona es estafada no le queda más que acudir a la justicia, porque estos productos no están regulados en la UE.

Cuando una persona decide invertir sus ahorros, según las normas técnicas de calidad sobre educación financiera que utilizan los educadores financieros de la AEPF, el orden de prioridad que debería seguir el consumidor es el siguiente:

  • Primero, hacer un fondo de liquidez y reserva, cuyo destino será atender imprevistos o situaciones de fuerza mayor, 

  • Segundo, invertir para los objetivos vitales (entrada para un piso, estudios de los hijos, cambio de coche, proyectos personales, etc.) y la jubilación, tema cada vez más importantes debido a los problemas que se le presentan al sistema público de pensiones para garantizar unas pensiones dignas en el futuro, 

  • Tercero, dinero destinado a la especulación, que es aquel cuyo objetivo es simplemente ganar dinero, y si puede ser mucho y a corto plazo, sabiendo que puedo perderlo todo, y es ahí donde están las criptomonedas.

Para las dos primeras tipologías de inversión garantizarme tener el dinero cuando lo necesite es lo más importante, por tanto, hay que cuidarse de elegir productos financieros que me garanticen, en circunstancias normales, que cuando necesite el dinero lo tendré, cosa diferente ocurre con las inversiones especulativas, cuyo objetivo es arriesgar el dinero que invierto hasta el punto de aceptar que puedo perderlo todo.

La realidad es que los criptoactivos son una tipología de producto muy arriesgados por varias razones.

  • Su precio sufre fluctuaciones extremas. Muchas criptomonedas sufren fluctuaciones de precios repentinas y extremas y tienen un carácter especulativo, ya que su precio a menudo se basa exclusivamente en la demanda de los consumidores, es decir, puede que detrás no haya ningún activo que lo respalde u otro valor tangible.

  • Información engañosa. algunos criptoactivos y productos relacionados (cursos, libros, etc.), se anuncian de forma agresiva, utilizando estrategias de marketing con información sesgada y en algunos casos deliberadamente engañosa. Por ejemplo, la publicidad centrada en las posibles ganancias y obviando los elevados riesgos, o utilizando influencers que normalmente reciben un incentivo financiero.

  • Ausencia de protección. No están regulados por la UE, y esto significa que en caso de fraude lo único que nos queda es acudir a la justicia.

  • Complejidad de los productos. Algunos productos que ofrecen exposición a criptoactivos son muy complejos, y veces, tienen la característica de incrementar la magnitud de las perdidas con las fluctuaciones.

  • Fraude y actividades maliciosas. Existen numerosos criptoactivos falsos y estafas cuyo único objetivo es robarles el dinero a los clientes.

  • Manipulación del mercado, falta de transparencia de precios y escasa liquidez: las transacciones en las plataformas frecuentemente no se realizan con trasparencia y la determinación del precio no es clara. Hay mucha concentración en la posesión de determinados criptoactivos y se ha detectado manipulación del mercado en múltiples ocasiones.

  • Ciberataques, riesgo operativo y problemas de seguridad. La tecnología de registro distribuido que sustenta los criptoactivos entraña riesgos específicos. Varios proveedores han sufrido ciberataques y graves problemas operativos. Muchos inversores han perdido sus criptomonedas por diferentes motivos, ataques, interrupciones del servicio, o por haber perdido sus claves de acceso a los monederos digitales.

En conclusión, desde nuestra asociación recomendamos prudencia, invertir primero en educación financiera de calidad y después a través de profesionales de la planificación, como son los educadores financieros de nuestra asociación, destinar dinero a las las necesidades personales y familiares utilizando tipología de productos regulados, como los fondos de inversión, planes de pensiones o seguros de ahorro, y finalmente si sobra algo dedicarlo a la especulación con criptomonedas u otros activos individuales, sabiendo que se puede ganar pero también perderlo todo. 

En esta materia, ¿cómo clasificaría la educación de los españoles en materia de inversión y planificación financiera?

La educación financiera sobre los criptoactivos, no solo en España, sino en todo el mundo, es aún precaria. Teniendo en cuenta que es un producto nuevo y que está floreciendo y popularizándose, aunque lleva ya más de 10 años en funcionamiento, es difícil que en algún país del mundo haya una buena formación y experiencia entre la población en criptoactivos. 

En España concretamente, la educación financiera está a la cola de la mayoría de los países europeos, por lo que aquí también vamos por detrás en este aspecto. Es un problema parecido al de las apuestas, que al no conocer la ley de probabilidades se cree que las posibilidades de ganar son muchas porque vemos en los medios de comunicación que siempre le toca a alguien. 

Tenemos que conseguir que los ciudadanos se formen en educación financiera y adquieran habilidades y actitudes que les ayuden a mejorar las decisiones con su dinero. Probablemente muchos consumidores rechazarían esta tipología de inversión si pudiesen solucionar sus problemas financieros de forma segura, y esto solo se consigue con una educación financiera de calidad, y en eso estamos en nuestra asociación, proponiendo programas de educación financiera de calidad a las empresas, en las escuelas, y a los ciudadanos directamente a través de nuestra web y de los educadores financieros de calidad.

¿Qué alternativas existen para mejorar dicha educación?

Los programas de educación financiera de calidad, aquellos que logran cambios de hábitos en el ciudadano utilizando herramientas y procedimientos basados en normas técnicas de calidad, y por supuesto, impartidos por profesionales certificados.

La AEPF cuenta con una red de educadores financieros de calidad que prestan servicio en toda la geografía española, en nuestra web, los ciudadanos pueden encontrarlos, su trabajo se basa en impartir los programas de educación financiera de calidad y ayudar a los ciudadanos en la elaboración de su planificación financiera personal. 

El objetivo principal de la AEPF es poner a disposición de las familias españolas un educador financiero de calidad para que les ayude con su planificación financiera y con sus decisiones financieras. Y para acelerar este proceso tenemos claro que la participación de las empresas es clave, por eso hemos elaborado un programa especifico de educación financiera de calidad para las empresas llamado YoWelfare in the company, para que ayuden en su organización a mejorar la educación financiera de sus miembros. Este programa las empresas pueden divulgarlo entre sus directivos y empleados e incluso pagárselo si tienen recursos para ello. Actualmente están destinando partidas relacionadas con los incentivos, RSC, beneficios sociales, formación, etc.

También creemos que el Estado debería de promover este tipo de educación en los centros educativos, administraciones locales, ONGs, y por supuesto subvencionar a las empresas para que los implementasen en sus centros de trabajo.

¿Qué le asesoraría a una persona que está pensando en invertir en criptomonedas o cualquier activo digital?

En primer lugar, me ocuparía de que conociese bien que son los criptoactivos, sobre todo sus riesgos, y en segundo lugar me ocuparía de que priorizase a que destinar su dinero, recomendándole que primero se ocupe de lo importante, y de forma segura, entendiendo por importante las necesidades personales y su familia, tanto presentes como futuras, y entendiendo por segura que cuando necesitase el dinero el capital esté, y si puede ser con unos rendimientos predecibles. Después, si sobra algo de dinero, si quiere que lo dedique a la especulación, destinándolo a juegos de azar o a los criptoactivos. 

Lo esencial es que se tenga claro que el principal problema del mundo de las criptomonedas es el riesgo que se asume, porque al no estar regulado, el mercado de las criptomonedas nos puede retornar cualquier resultado, positivo o negativo. 

¿Qué diferencias tiene este método de inversión comparado a otros más tradicionales como los fondos de inversión u otros productos financieros?

La principal novedad de este tipo de inversión es que es una moneda virtual descentralizada, es decir, no está respaldada por ningún banco central, fondo internacional u organización. Este es el hecho principal que la hace tan arriesgada, y por el momento es simplemente una herramienta para la especulación y ganar dinero, con mucho más riesgo y potenciales ganancias que los productos financieros tradicionales, como los fondos de inversión, planes de pensiones, o las simples cuentas corrientes para el día a día.

Otra gran diferencia es que, a través de un intermediario financiero regulado, como los bancos, por ejemplo, el dinero en cuenta está respaldado hasta 100.000€ por titular, una inversión en fondos o planes de pensiones su regulación ofrece una seguridad total para el participe, y los productos de seguros igual. Las criptomonedas, al no estar reguladas por ningún ente, organización o fondo, no tienen ninguna obligación de respaldo a los clientes que las tienen. 

Lo mismo pasa con la inversión directa en bolsa, las acciones que compras están respaldadas por la empresa que las emite y por el control del regulador, las criptomonedas no. Las monedas virtuales son, por el momento, una apuesta en un mercado no regulado, en donde tú compras una moneda y esperas que mañana otro inversor te la compre más cara, nada más.

¿Puede ser en el futuro una herramienta útil para la sociedad, más allá de su uso para ganar dinero?

El mundo digital seguirá desarrollándose, la clave va a estar en la regulación del mercado de los criptoactivos, y cuales serán las que definitivamente se utilicen de forma oficial. 

Ciertamente la tecnología de cadena de bloques, más conocida comúnmente como blockchain, es una tecnología que ofrece un abanico de posibilidades amplio, ya que es una tecnología que actúa en la red y además ofrece una seguridad y discreción para las transacciones muy grande, más de la que dan ahora bancos, aseguradoras y otras plataformas de pagos. 

Hay numerosos países que ya están preparando o tienen en circulación monedas virtuales, China (en proyecto piloto aún), varias islas caribeñas como Bahamas o Antigua y Barbuda. Estas monedas, al estar respaldadas por un banco central del país emisor, tienen una seguridad mayor que la de otras criptomonedas que hay en circulación. Estas son las que podrían tener más uso en un futuro, a parte del de la especulación para ganar dinero, ya sea para pagar en comercios, depositar ahorros, recibir un sueldo, etc.