El Tesoro coloca 5.562 millones en su última emisión de septiembre

El Tesoro Público ha colocado 5.562,2 millones de euros en su última emisión de septiembre, centrada en obligaciones del Estado, cumpliendo así con las previsiones iniciales, según ha informado el Banco de España. En esta operación, el interés ofrecido a los inversores se ha reducido en todas las referencias subastadas.

La demanda total alcanzó poco más de 9.700 millones de euros, quedando por debajo del doble de la cantidad adjudicada. Este comportamiento de la subasta ha estado influido por la reciente decisión del Banco Central Europeo (BCE) de reducir los tipos de interés en 25 puntos básicos, situando la tasa de depósito en el 3,50%.

El contexto de política monetaria ha afectado a las subastas del Tesoro en los últimos meses, incrementando los intereses ofrecidos a los inversores debido a las sucesivas subidas de tipos. Esto ha aumentado el atractivo de la deuda pública, en particular entre los hogares interesados en letras del Tesoro. Sin embargo, tras el recorte de los tipos, el Tesoro ha comenzado a reducir la rentabilidad en sus emisiones recientes.

En esta ocasión, el Tesoro ha disminuido los intereses marginales de las Obligaciones del Estado con una vida residual de 4 años y un mes, las de 7 años y las de 20 años, todas ellas con cupones del 5,15%, 3,10% y 3,45%, respectivamente.

Específicamente, en las Obligaciones con una vida residual de 4 años y un mes, se adjudicaron 1.404,128 millones de euros frente a las solicitudes de 2.879,243 millones, con un interés marginal del 2,478%, por debajo del 3,197% registrado en la emisión anterior.

En las Obligaciones a 7 años, se colocaron 2.384,288 millones de euros frente a una demanda de 3.799,302 millones, con una rentabilidad del 2,701%, menor que el 3,420% de la subasta anterior.

Finalmente, en las Obligaciones a 20 años, se adjudicaron 1.773,757 millones de euros, con una demanda de 3.038,257 millones, y un interés marginal del 3,534%, inferior al 3,652% de la subasta anterior.

El Tesoro tiene previsto cubrir unas necesidades de financiación de aproximadamente 55.000 millones de euros en 2024, lo que supone una reducción de 10.000 millones respecto al año anterior. La emisión bruta ascenderá a 257.572 millones de euros, un 2% más que en 2023, debido al aumento de las amortizaciones. Se mantendrá la estrategia de emitir instrumentos a medio y largo plazo para preservar la vida media de la deuda pública.

Asimismo, el Tesoro recurrirá a las sindicaciones para emitir determinadas obligaciones del Estado y reforzará su apuesta por los bonos verdes, integrándolos como una parte estructural de su programa de financiación, con el objetivo de fortalecer el mercado de finanzas sostenibles.